En octubre se vendieron cuatro coches usados por cada uno nuevo

Las ventas de coches de segunda mano siguen creciendo. El pasado mes de octubre se registraron un total de 170.757 transferencias, lo que supone un incre mento del 29,1% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, según  la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto).

En lo que va de año, las adquisiciones de vehículos usados suman 1.322.980, un 5,4% más que en 2011. De seguir esta evolución, el mercado cerrará 2012 con un total de 1,6 millones de transferencias, un 6% más.

El comportamiento del mercado de vehículo nuevo continúa provocando que la ratio coche nuevo frente a coche usado se mantenga alta. En octubre se vendieron casi cuatro coches usados por cada nuevo. En 2007, al comienzo de la crisis económica, la relación entre nuevos y de ocasión era de uno a uno.

El mercado sigue impulsado por las ventas hechas por los profesionales (concesionarios y compraventas), que en octubre crecieron un 39% y acaparando el 37,8% del total. Son sin embargo las transferencias hechas entre particulares las que siguen acumulando más peso, con un 57% del total, incrementándose un 28% respecto al año pasado.

Por edades, el porcentaje de vehículos con más de diez años de antigüedad aumenta, y en octubre supusieron el 43% de las ventas totales, con 73.116 transferencias. Los modelos de cero a cinco años de edad alcanzaron las 50.756 transferencias, con un incremento del 29,7%. Finalmente, los que van de cinco a diez años de antigüedad aumentaron un 27,4%, con un total de 46.885 transacciones.

De esta manera, las previsiones de la federación señalan que  media de edad de los vehículos usados en España será de 9,4 años al final de este ejercicio. Solo Estonia y Grecia tienen en Europa coches con una antigüiedad media superior.

Por otra parte, según la plataforma de vehículos en la Red AutoScout24, el importe medio de los coches de ocasión en España se contrajo un 4,9% hasta el mes de octubre y se sitúa en torno a los 12.400 euros gracias a la presión del Plan PIVE, unos 2.000 euros de ayudas oficiales y de los fabricantes a la compra de coches poco contaminantes y de menos de un año de antigüedad.