Explorar una playa con la furgoneta en pleno temporal, una imprudencia que puede costar 200.000 euros

A pesar de los numerosos avisos por el temporal de viento y lluvia que ha azotado Galicia estos días, hubo a quien no le llegaron los mensajes o decidió no atenderlos. El resultado de esta actitud fue una furgoneta atrapada en la arena, que no sólo costó sacar de allí: también supondrá un elevado coste para el bolsillo del conductor.

Los hechos tuvieron lugar el domingo por la tarde en la playa de Os Botes, ubicada en la parroquia de Meirás, en el municipio de Valdoviño (A Coruña). Fue allí donde una furgoneta se quedó varada en la arena y tuvo que ser rescatada: la operación no fue sencilla.

El conductor, natural de Navarra, viajaba desde Lugo a bordo de su furgoneta y, según relata La Voz de Galicia, explicó que bajó a la playa para dar la vuelta. El medio añade que esta maniobra no es sencilla porque, para ello, hay que atravesar un camino complicado, un aparcamiento de arena y una pequeña rampa de cemento que usan los pescadores para dejar sus botes.

Teniendo en cuenta que la marea estaba subiendo y que a las cinco de la tarde alcanzó la pleamar, momento en el que el mar alcanza su mayor altura, el agua cubrió parcialmente los bajos de la furgoneta, concretamente las ruedas. Esto impidió al conductor salir de la playa.

La multa de la Guardia Civil

En un primer momento, la grúa del seguro intentó, sin éxito, sacar la furgoneta de la arena. A continuación, acudieron un vehículo todoterreno y una grúa con cabestrante, que se desplazó desde la comarca de Ferrol. Ninguno lo logró. Fue un tractor del Ayuntamiento de Valdoviño el que sacó la furgoneta de la arena.

El episodio no será una anécdota más del temporal, al menos para el conductor, que tendrá que hacer frente a varias multas. El artículo 33 de la Ley de Costas prohíbe “el estacionamiento y la circulación no autorizada de vehículos, así como los campamentos y acampadas” en las playas. La sanción por incumplir este precepto oscila entre los 50 y los 150 euros.

Una segunda sanción de hasta 200.000 euros

La Guardia Civil no es la única que va a pedirle responsabilidades. La Xunta de Galicia hará lo propio porque la playa de Os Botes es un territorio protegido de la Red Natura 2000.

Así las cosas, la ley 5/2019 del patrimonio natural y de la biodiversidad de Galicia prohíbe, entre otras cosas, “transitar, circular con vehículos” en “los espacios naturales protegidos, cuando se causen daños a los valores protegidos”. Al tratarse de una infracción grave, la multa puede ir desde los 3.001 a los 200.000 euros, dependiendo del daño causado.