La Visión de Mercedes es autónoma y de hidrógeno

La marca de la estrella presenta un prototipo en Tokio con tecnología de última generación y un interior que parece el salón de tu casa.

Hasta hace bien poco el futuro automovilístico parecía híbrido, pero no: eso ya es el pasado. El futuro de nuestros coches pasa por la propulsión vía pila de combustible y, por cierto, no los conducirás tú, serán autónomos. Te llevarán solos a donde les digas y tú, como miembro de la generación digital que eres, te pasarás el viaje disfrutando de diversos gadgets y aplicaciones.

Parece que la industria se ha puesto de acuerdo en las premisas anteriores, y la única cuestión es la prisa que tienen las propias marcas para que se hagan realidad. Hasta que se decidan, unas y otras presentan prototipos que juegan con dichas ideas y nos ofrecen trazas de lo que está por llegar, con la diferencia de que en algunos casos son modelos que parecen más plausibles a corto plazo, y en otros dan un salto temporal mayor y son de un corte más futurista. El Mercedes Vision Tokyo pertenece al segundo grupo.

Por raro que parezca, más teniendo en cuenta su peculiar estética, el exterior de este modelo no importa. El envoltorio cumple su función de ser atractivo para captar la atención del espectador, pero lo que realmente tiene ‘chicha’ es su interior.

La descripción que hace la marca del modelo, un “salón con ruedas para la futura generación de megaciudades”, deja bastante claro por dónde van los tiros. Ya no se trata de conducir de eso se encarga el propio coche, que es autónomo; si no de aprovechar el tiempo en el coche y estar a gusto en él.

Para ello hay que empezar por unas dimensiones que garanticen una buena habitabilidad interior: 4.803 mm de longitud, 2.100 mm de anchura y 1.600 mm de alturas. Esto genera un espacio interior suficiente para cinco personas, con una disposición bastante peculiar en forma ‘U’, con un extremo delante (con sitio para colocar el puesto de conducción), el otro detrás y la abertura en el extremo en que se encuentra la única puerta, con sistema de apertura vertical.

El resultado final es similar a estar en el salón de casa en un enorme sofá, solo que en vez de enfocando a la tele el foco de atención se sitúa en el centro, en un proyector de hologramas. Como lo lees, un proyector que se puede controlar mediante gestos para obtener información del coche o del viaje, así como para utilizar los sistema de entretenimiento.

Dicho esto, que funcione con un sistema híbrido que combina electricidad y pila de hidrógeno parece pecata minuta. El sistema ofrece una autonomía combinada de 980 km.

Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram

Newsletter ElMotor

Recibe la newsletter de EL MOTOR con toda la actualidad del mundo del automóvil y la moto, tecnología, seguridad, conducción y eficiencia.

Apúntate

Servicios ELMOTOR

Encuentra los mejores talleres, seguros, autoescuelas, neumáticos…

BUSCAR
Cerrar

NEWSLETTER

Toda la actualidad del mundo del automóvil y la moto, tecnología, seguridad, conducción y eficiencia en tu buzón de correo.

¡Me interesa!
Por ahora no