Volkswagen T-ROC R-Line, dinamismo para el SUV compacto

El previsible superventas de la marca suma una variante que le otorga un estilo más deportivo tanto en el exterior como en el habitáculo.

Volkswagen T-ROC R-Line

Un ligero toque deportivo que no es radial.

Llega algo tarde al concurrido segmento de los SUV compactos, pero no por ello deja de apuntar alto: el Volkswagen T-ROC quiere ser un auténtico superventas y, dando su carácter de todocamino de acceso a la gama con un aire jovial y desenfadado, añadir versiones de corte más dinámico no puede sino ayudar a ese propósito. Para aquéllos que busquen ese extra, la marca lanza el T-ROC R-Line.

Se trata, eso sí, de una deportividad contenida, y es que hay que echar un segundo vistazo para encontrar los añadidos que incorpora. En el frontal luce una rejilla negra específica y el logo R-Line, se añade un listón cromado al paragolpes y los bajos son de color negro, también en los laterales y la trasera. En esta zona, además, monta un nuevo difusor y los pilotos se oscurecen. También se puede elegir entre dos tipos de llantas exclusivas, las Sebring de 18 pulgadas y las Suzuka de 19.

El fabricante no ha desvelado imágenes del habitáculo, pero sí ha anunciado los detalles diferenciadores con los que cuenta: volante deportivo forrado en cuero, techo de color negro, asientos con tapicería mixta y pedales de acero inoxidable.

No cambia ningún aspecto mecánico, estando disponible con todas las opciones del modelo base, que ya se presentó hace unas semanas.

Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, Twitter o Instagram

Salir de la versión móvil