Las bondades de un eléctrico y la personalidad de un Mini. Así es el nuevo Cooper, que se presenta en el mercado como una opción muy competitiva entre el resto de coches eléctricos de su categoría, sobre todo para aquellos que buscan diferenciarse.
El nuevo Mini Cooper respeta en su versión eléctrica la estética que lo caracteriza desde hace décadas: faros redondos y el marco de la anterior parrilla en el frontal, con una trasera de hombros musculosos bien asentada. El efecto de techo flotante, con los cristales de las ventanillas sin marco y tintado en negro, se mantiene también en esta nueva versión.
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El paso de los años se nota en este coche para bien. Las diversas actualizaciones y versiones han ido readaptando la imagen del Mini a los tiempos modernos, pero respetando, por así decirlo, la tradición. Es en cuestión de motores y tecnología donde más se nota, obviamente, el cambio.
Dos motores, dos baterías
El nuevo Mini Cooper eléctrico se comercializa en dos versiones distintas, la E y la SE, que equipan dos motores con ligeras diferencias. El primero lleva un motor eléctrico de 184 CV con un par de 290 Nm, acelerando de 0 a 100 km/h en 7,3 segundos. El SE, mucho más deportivo, entrega 218 CV y 330 Nm de par, acelerando de cero a 100 km/h en 6,7 segundos.
Las baterías de ion litio de cada versión también presentan cifras relativamente diversas. El Mini Cooper E cifra los 305 kilómetros en ciclo WLTP con una capacidad de 40,7 kWh mientras que la versión deportiva sube hasta los 402 kilómetros homologados, con 54,2 kWh.
Como ejemplos de consumo, para un recorrido muy combinado de 140 kilómetros, la cifra media de kWh se queda en 11,3. Al inicio de la ruta la batería del Cooper SE estaba cargada y al final del mismo quedaban todavía 233 kilómetros.
El nuevo Mini eléctrico se presenta como un coche divertido y ágil, con un marcado carácter deportivo y una suspensión algo dura. Durante la conducción, se aprecia claramente que es un coche eléctrico con una entrega de par inmediata. La retención en la frenada, típica en estos motores, es en algunas ocasiones algo agresiva, pero todo es cuestión de coger el tacto al pedal. En ciudad, esta retención es útil para utilizar el acelerador como pedal único hasta que no haya que detener el coche por completo.
El volante ha experimentado un rediseño que le confiere más volumen. Es muy agradable al tacto, gracias al uso de nuevos materiales, y presenta detalles que lo hacen único en cada coche, como un embellecedor textil en la parte baja. Como no podía ser de otra manera, dispone de comandos para controlar, por ejemplo, la música.
Minimalismo, pero con carácter
En el interior, el nuevo Mini se caracteriza por la sobriedad y la originalidad. En el salpicadero no hay apenas botones y el cuadro de instrumentos ‘desaparece’. El equipo de diseño ha decidido eliminar la típica pantalla detrás del volante y colocar una suerte de head-up display en una posición más atrasada, manteniendo una visión más limpia.
En este HUD se muestran los datos más básicos de conducción, como la velocidad. La gran pantalla circular que domina todo el salpicadero hace las veces de cockpit. Aquí se pueden consultar las instrucciones de la navegación, la velocidad y el resto de funcionalidades propias del sistema de infoentretenimiento, que son muchas.
Es cierto que a cualquier conductor no acostumbrado esta nueva organización del espacio y las pantallas puede resultarle algo extraña. Es más, es necesario regular bien el volante y el asiento para que este primero no obstaculice la visión del head-up display. Una vez configurada la posición de circulación, es cierto que la atención se centra más en carretera.
Cuatro melodías para el Mini Cooper eléctrico
Dirigiendo la atención a la pantalla central, la conectividad es una de las características más destacadas. Desde conectar el teléfono hasta instalar aplicaciones, las opciones son muchas y muy variadas gracias al nuevo MINI Operating System 9. Además de las posibilidades de control por voz y uso, el Mini Cooper da la opción de poder personalizar al máximo el sistema, incluyendo la conexión con el teléfono móvil a través de su app para abrir el coche, cambiar el fondo de la pantalla y mucho más.
Lo mismo sucede con los modos de conducción: hay uno para cada momento. No solo inciden en el comportamiento de este Mini eléctrico, sino que a la vez configuran el espacio, la gráfica de la pantalla y las luces del interior. Los MINI Experience Modes básicos son Core, Green y Go-Kart, pero también se puede elegir el Timeless y personalizar un modo propio.
Una de las funciones que llama la atención es la del sonido. Como buen eléctrico, este Mini Cooper no hace ruido al rodar, por lo que se han creado cuatro bandas sonoras que ambientan la conducción fuera y dentro del habitáculo. En el modo Timeless, se recrea el sonido del Mini Morris de los sesenta. En el Go-Kart, la melodía es más deportiva.
Precios del nuevo Mini eléctrico
El nuevo Mini Cooper eléctrico, en todas sus versiones, empezará a llegar a los clientes en poco menos de dos meses. Los precios y las diferentes configuraciones se pueden consultar en la web, pero en resumen quedan, sin descuentos, así:
- Mini Cooper E: 35.000 euros en la versión básica.
- Mini Cooper E en acabado John Cooper Works: 44.060 euros.
- Mini Cooper SE: 44.510 euros en la versión básica.
- Mini Cooper SE acabado John Cooper Works: 47.660 euros.
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Graduada en Periodismo por la Universidad de Zaragoza, su primer contacto con el mundo del motor fue en los mundiales de MotoGP y Superbikes. Dio el salto al periodismo de motor hace cinco años y, desde entonces, sigue todo lo que tenga ruedas, especialmente si es made in Italy.