Bugatti es una de esas marcas con las que muchos sueñan pero que muy poco se pueden permitir, como el afortunado y adinerado dueño del La Voiture Noire, por ejemplo. Sin embargo, el fabricante va lanzar un modelo asequible que solo costará 30.000 euros. ¿El truco? Se trata de un coche pensado para los más pequeños de la casa, aunque también pueden montarse en él adultos.
Es el Bugatti Type 35 Baby II, cuyo nombre deja claro que es el sucesor del original, una réplica a escala 1:2 que crearon en 1926 Ettore y Jean Bugatti para el hijo de aquel, Roland, cumplió los cuatro años. Lo que iba a ser una unidad única en su momento, acabó convertido en una serie limitada de 500 unidades debido a las peticiones de los clientes.
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Ahora, en pleno 2019, el juguete vuelve con algunas similitudes y bastantes diferencias. De hecho, también se fabricará una tirada de solo 500 ejemplares, que ya se pueden solicitar y cuyas entregas tendrán lugar a partir de otoño. Sin embargo, crece respecto a su predecesor, y es que tiene 3/4 del tamaño del Type 35 original.
Otra similitud entre ambos es que son eléctricos, con el moderno confiando en un sistema formado por un motor que puede entregar tres cifras de potencia distintas. En el modo Niño solo rinde 1kW (1,3 CV) y alcanza hasta 20 km/h; en el modo Adulto llega a 4 kW (5,5 CV) y 45 km/h, y si se instala la mejora con la Llave de velocidad, sistema que tienen sus hermanos mayores, se desbloquean 10 kW de potencia (13,6 CV) y se elimina el limitador de velocidad.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.