El asalto de las marcas de coches chinos a los mercados europeos es total. En los últimos dos años han ido desembarcando en el Viejo Continente fabricantes con enfoques muy diferentes, la mayoría centrados en los coches eléctricos, pero algunos buscando hacerse hueco entre las firmas prémium ya establecidas y otros queriendo su parte del mercado generalista.
Hasta la fecha, el de los coches más baratos, que a priori sería el más indicado debido a las ideas preconcebidas sobre la industria del motor china, se ha dejado de lado, pero eso va a cambiar en 2024, cuando llegará una marca ‘low-cost’ perteneciente a uno de los grupos chinos más potentes: NIO.
Ya ha confirmado el lanzamiento de su marca más asequible, Firefly, con la que tiene intención de ampliar su cuota de mercado ofreciendo modelos muchos más baratos de los que ofrece en la actualidad.
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La gama de NIO, formada por modelos de cero emisiones en exclusiva, orbita en una horquilla de precios que va de los 50.000 a los 100.000 euros, una cuantía elevada que, además, puede suponer una barrera de entrada para los compradores, que quizá no quieran desembolsar tanto dinero para un modelo de origen chino.
Esto, sin embargo, se solventaría con la llegada de los automóviles de Firefly. También son coches eléctricos, pero presentan unas tarifas mucho más asequibles, con modelos que estarán disponibles por debajo de los 30.000 euros.
Lógicamente, este ahorro vendrá acompañado de recortes y es que dichos vehículos no tendrán el enfoque prémium de la otra marca, además de que serán modelos de tamaño menor, con un corte más urbano pero aun así suficientes incluso para familias.
De esta manera, el grupo desdobla su personalidad en dos marcas diferenciadas, cada una con una personalidad muy distinta que no afecte al posicionamiento de la otra. Se trata de un planteamiento habitual que llevan a cabo otros fabricantes, como es el caso de Toyota y Lexus, o como era en su día la dupla que formaban Nissan e Infiniti, que ya no se vende en España.
Los coches de Firefly
Todavía no hay datos sobre qué modelos llegarán a Europa, pero hace unos meses salió a la luz que la compañía preparaba su lanzamiento para el tercer trimestre de 2024 y que debutará con un utilitario en la línea del Volkswagen Polo, aunque se ofrecería exclusivamente con una mecánica 100% eléctrica.
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