Como ya es sabido, a partir de 2035, la Unión Europea prohibirá la venta de coches nuevos que emitan CO₂, con el objetivo de que todos los turismos y vehículos comerciales ligeros sean neutros en emisiones. Aunque esta normativa parece señalar el fin del motor de combustión, en favor de la electrificación o el hidrógeno, en realidad deja una puerta abierta a su continuidad mediante el uso de tecnologías que no generen emisiones directas.
Así, la normativa europea no implica la desaparición definitiva del motor de combustión interna. El Parlamento Europeo ha instado a la Comisión a permitir la matriculación, más allá de 2035, de vehículos que funcionen exclusivamente con combustibles neutros en CO₂. Esto permite ganar enteros a los e-fuels o carburantes sintéticos, lo que abre un nuevo horizonte para los motores tradicionales adaptados a esta nueva fuente energética. Mientras tanto, los combustibles renovables son el modelo perfecto para esta transición.
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Para liderar este tránsito hacia la descarbonización total del sector, Repsol ha reafirmado su compromiso con la transición energética a través de los combustibles renovables, una solución viable y disponible para reducir las emisiones de CO₂ sin necesidad de renovar la flota de vehículos ni modificar infraestructuras de repostaje. Estos carburantes pueden emplearse en motores de combustión actuales y permiten una reducción de hasta un 90% menos en las emisiones netas de CO₂ en comparación con los combustibles de origen fósil.
Emisiones de dióxido de carbono nulas
La compañía ha desarrollado una gasolina renovable a partir de residuos orgánicos como aceites de cocina usados o biomasa agroalimentaria. Además, el uso de los biocombustibles permite reducir las emisiones de dióxido de carbono gracias a que el CO₂ liberado durante su uso es equivalente al CO₂ que se ha retirado previamente de la atmósfera por la materia prima usada para su obtención. Por lo que su huella de CO₂ es nula.
Gasolina y diésel 100% renovables
Este combustible, inicialmente disponible en estaciones piloto en Madrid, aprovecha la experiencia de Repsol en la alta competición para optimizar su rendimiento. Por su parte, el Diésel Nexa 100% Renovable, ya presente en más de 1.000 estaciones de servicio en la Península Ibérica, destaca por su formulación avanzada que mejora las prestaciones del motor.
Biocombustibles y ‘e-fuels’
Dentro de los combustibles renovables se distinguen los biocombustibles y los combustibles sintéticos o e-fuels. Los primeros se producen a partir de residuos orgánicos, como restos vegetales o industriales, mientras que los e-fuels se obtienen mediante la combinación de hidrógeno renovable y CO₂ capturado de la atmósfera. Aunque estos últimos aún están en fase piloto, representan una vía prometedora para sectores de transporte difíciles de electrificar.
Infraestructuras en expansión
Repsol lidera el desarrollo industrial de estos combustibles con plantas en Cartagena y próximamente en Puertollano, enfocadas en la producción a gran escala. Además, impulsa iniciativas como la recogida de aceite doméstico usado en más de 450 estaciones, reforzando así su modelo de economía circular.
Motos clásicas
Aunque la teoría y el papel todo lo aguantan, Repsol quiso que su combustible renovable se pudiera probar in situ, y de qué mejor manera que sobre motores de otra época. Para ello, convocó a la prensa especializada en el Museo de la Moto de Alcalá de Henares (Madrid), de donde salieron 11 motocicletas con más de 40 años a sus espaldas, alguna incluso con más de 60 años de vida.
Funciona a la perfección
De esta manera, la compañía petrolera española quería demostrar que sus nuevos combustibles renovables pueden incluso usarse en propulsores que fueron fabricados para soportar gasolina con plomo. La jornada permitió disfrutar de estas clásicas fabricadas en España, sin sobresaltos y sin problemas mecánicos, al usar la gasolina más moderna de Repsol. El carburante del futuro en monturas del pasado.
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Entusiasta del motor en toda su magnitud, preferiblemente los V12. Le dijeron que cuatro ruedas eran mejor que dos, por eso se compró otra moto. Claro que también le apasiona cuando van las cuatro juntas. Ha trabajado como creativo publicitario para muchas marcas de coches y motos e hizo la mili en esto de juntar letras en la editorial Luike.