Cómo evitar averías de más de 1.000 euros: trucos para cuidar el embrague

Madrid |

El embrague es más que el tercer pedal de los coches con cambio manual. Si se avería, las reparaciones pueden ser carísimas.

avería embrague

Foto: Getty

En los coches con cambio manual, los pedales son tres: embrague, freno y acelerador. El embrague, que desaparece en los cambios automáticos, es mucho más que un pedal. Es el enlace mecánico entre el motor y la transmisión y, sin él, sería imposible cambiar de marchas.

Como todas las piezas del coche, el embrague puede sufrir averías por desgaste. Al final, el uso acaba haciendo mella en estos mecanismos inevitablemente, pero se puede retrasar el paso por el taller siguiendo varios consejos.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que el pedal del embrague se debe pisar siempre hasta el fondo cada vez que se quiera cambiar una marcha. De lo contrario, el mecanismo que desacopla la transmisión del motor para poder cambiar la marcha no ejecutará su función de manera correcta. La consecuencia más directa son esas rascadas que suenan al cambiar, que obviamente deterioran el mecanismo.

Otro consejo muy útil es recordar no dejar la marcha metida y el pedal pisado en los semáforos. Para evitar un desgaste del embrague y, por lo tanto, averías prematuras, lo mejor es dejar el punto muerto, así el mecanismo no sufrirá tanto.

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Hay dos razones por las que se debe pisar el embrague antes de arrancar.Foto: Getty

Lo mismo sucede con dejar el pie apoyado en el pedal del embrague al conducir. Cuando circulan por carretera o autovía, donde no se suele cambiar tanto de marchas, hay conductores que dejan el pie sobre el embrague inconscientemente, produciendo una tensión constante en el pedal.

Precio de sustituir el embrague

También hay que tener cuidado con el uso del embrague en conducción. Es importante afinar la coordinación entre acelerador y embrague para evitar desgastes que acaben provocando averías graves y, por supuesto, en los modelos más antiguos, usar el freno de mano para sujetar el vehículo en cuestas pronunciadas.

Algunos de los síntomas que muestran que algo sucede con el embrague son la sensación de que el pedal patina, un fuerte olor a quemado, o ruidos extraños, como esas rascadas antes mencionadas. La sustitución de todo el embrague puede superar tranquilamente los mil euros.

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Andrea Gil

Graduada en Periodismo por la Universidad de Zaragoza, su primer contacto con el mundo del motor fue en los mundiales de MotoGP y Superbikes. Dio el salto al periodismo de motor hace cinco años y, desde entonces, sigue todo lo que tenga ruedas, especialmente si es made in Italy.

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