La tragedia griega del ‘caravaning’: ¿llegará esta drástica prohibición a otros países?

Grecia, tierra de historia milenaria y paisajes de ensueño, ha tomado una decisión que ha caído como un jarro de agua fría entre los viajeros que eligen un vehículo como su hogar itinerante. La reciente implementación de una ley prohíbe tajantemente estacionar cámpers, caravanas y autocaravanas en cualquier espacio público que no sean los designados. La libertad de pernoctar junto a una playa paradisíaca o al abrigo de un bosque se ha esfumado de un plumazo.

Esta medida, que ya ha comenzado a aplicarse, impone multas de hasta 300 euros por persona (y con la amenaza de penas de prisión de hasta tres meses para los reincidentes), ha generado una ola de malestar e incertidumbre. Tal y como recogen diversos medios, la sorpresa ha sido mayúscula entre los turistas y los propios ciudadanos griegos que disfrutan de esta forma de viajar.

La justificación oficial del gobierno heleno apela a la “protección del medioambiente y de los espacios arqueológicos”, así como a la necesidad de regular el sector y evitar la competencia desleal a los campings establecidos. Sin embargo, la realidad es que esta prohibición generalizada deja a los caravanistas sin apenas alternativas, especialmente ante la escasez de áreas de servicio específicas para este tipo de vehículos.

Peticiones de derogación

La indignación ha llegado hasta el punto de crearse peticiones por internet para solicitar la derogación de la ley o, al menos, la habilitación de zonas de estacionamiento reguladas. La sensación general es que Grecia, un país tradicionalmente acogedor con el turismo, está dando la espalda a un colectivo cada vez más numeroso que busca precisamente la autonomía y el contacto con la naturaleza que ofrece el caravaning.

La incertidumbre reina entre los caravanistas europeos, dejando muchas preguntas en el aire: ¿significará esto un éxodo de vehículos viviendo hacia otros destinos más permisivos? ¿Se replanteará el gobierno griego esta controvertida medida ante el posible impacto en el turismo? ¿Se sumarán más gobiernos de la Unión Europea a esta iniciativa? Lo que está claro es que, por ahora, la aventura sobre ruedas en Grecia se ha topado con un gran obstáculo.