Zigzaguear entre carriles: el hábito peligroso que multiplica el riesgo en carretera y que supone una gran multa

Zigzaguear entre carriles para ganar unos segundos en carretera se ha convertido en una práctica habitual entre algunos conductores. Sin embargo, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha vuelto a advertir sobre los peligros que esta conducta representa para la seguridad vial. En una reciente publicación en su cuenta oficial de X (antes Twitter), el organismo recuerda que esta acción puede provocar situaciones de alto riesgo para todos los usuarios de la vía.

Cambiar de carril de forma constante y sin necesidad real genera incertidumbre en el resto de los conductores. Esta falta de previsibilidad puede desencadenar frenazos bruscos, invasiones de carril y, en el peor de los casos, colisiones. Además, el zigzagueo suele ir acompañado de una conducción agresiva, que incrementa el estrés en el tráfico y reduce la capacidad de reacción ante imprevistos.

La DGT insiste en que circular encarrilado no solo es una norma, sino una garantía de seguridad. Saltar de un carril a otro para avanzar más rápido no justifica el riesgo que se asume ni el que se impone a los demás. La anticipación, el respeto por la distancia de seguridad y la señalización adecuada son pilares básicos para una conducción responsable.

Multas y pérdida de puntos

Circular de manera imprudente haciendo zigzag entre los carriles constituye una infracción grave en España. Esta conducta, que pone en riesgo la seguridad vial al dificultar la fluidez del tráfico y la reacción de otros conductores, puede acarrear una multa de 200 euros. Además, si la maniobra se considera conducción temeraria, por invadir el carril contrario o generar un peligro inminente, la sanción económica podría ascender hasta los 500 euros y conllevar la retirada de seis puntos del carnet de conducir.

En definitiva, al circular con un vehículo, se debe de tener claro que cada decisión que toma el conductor y que infringe el código de circulación, tiene sus consecuencias. En este caso, Zigzaguear puede parecer una forma de ganar tiempo, pero en realidad es una apuesta peligrosa que puede costar caro. Y es que, la seguridad empieza por el respeto a las normas y a los demás conductores.