Harley-Davidson venderá su Street 750 por 7.300 euros

Harley-Davidson presentó en el último Salón de Milán un nuevo concepto de motocicleta en su gama, que llegará a los concesionarios españoles a finales del próximo mes de abril. Se trata de la Street 750, una moto ligera y económica, que busca atraer el interés de una clientela más joven y que se venderá por 7.300 euros en color negro y por 7.500 euros en el color opcional rojo.

La Street es una Harley que poco tiene que ver con todo lo conocido en la marca de Milwaukee hasta ahora. Es un producto fabricado con vocación global, intentando introducirse en mercados emergentes, como los del sureste asiático, y que también apunta a otros perfiles de clientes occidentales. Se fabrica indistintamente para todos los países en sus plantas de Estados Unidos e India y sus responsables aseguran que no existe diferencia alguna en la calidad de producción de ambas factorías, que las motos que salen de cada una de ella son absolutamente iguales.

Lo cierto es que la Street 750 (en algunos mercados se ofrecerá también en una variante de 500cc) evidencia que se trata de un modelo de bajo coste dentro de una marca tan exclusiva y prestigiosa como Harley-Davidson. Los materiales que utiliza y sobre todo los acabados están por debajo de lo habitual en sus productos, aunque sus diseñadores han pretendido mantener el espíritu de una marca legendaria para acercarlos a compradores que, de otro modo, no se plantearían optar a la marca, incluyendo los más jóvenes y el público femenino.

La Street 750 es una moto ligera y manejable, ideal para la ciudad y que monta un motor de nuevo desarrollo de dos cilindros en V, con refrigeración líquida y un cubicaje de 750cc, con una potencia suficiente (no declarada) para las pretensiones del modelo. Lo cierto es que propulsor Revolution X tiene una respuesta briosa y contundente, gracias a su inyección electrónica y apoyado en un cambio de seis velocidades.

Es mucho más ágil en tráfico urbano que cualquier otra Harley, incluyendo las Sportster, con una dirección rápida y un bajo centro de gravedad que facilita moverse entre coches, maniobras o aparcarla. En carretera también se defiende con dignidad, especialmente al considerar que ése no es su hábitat natural, aunque no renuncia a desplazamientos de cierta entidad y es ideal para los de tipo interurbano.

El equipamiento se presenta más sencillo que el que ofrecen sus hermanas de mayor precio, desde la instrumentación a los mandos pasando por unos intermitentes que carecen de desactivación automática o unos amortiguadores blandos, mientras que el ciertos acabados también se aprecia que nos encontramos ante un estándar de calidad diferente al que se usa en el resto de su gama (es el caso del cableado eléctrico).

Pero con un precio muy ajustado y condiciones de financiación, seguro e incluso mantenimiento especiales, la Street 750 se ciñe fielmente al guión que han previsto los responsables de la marca en ese objetivo de su expansión global: una moto al alcance de muchos, fácil de manejar y atractiva para un público no introducido en la experiencia Harley-Davidson. Quienes siempre soñaron con conducir una, ahora tienen más fácil hacerlo.