Bugatti Bolide: diseñado solo para el circuito y con 1.850 CV

Bugatti es una marca que se caracteriza por crear hiperdeportivos extremos, pero con su última creación ha ido un paso más allá. En la compañía se preguntaban qué pasaría si construyeran un hiperdeportivo para circuito que cumpliera con los requisitos de seguridad de la FIA, y la respuesta es el espectacular Bolide.

Por el momento se trata solo de un estudio de diseño, un prototipo, pero no cabe descartar la posibilidad de que la firma acabe optando por fabricarlo aunque sea en forma de tirada muy limitada.

De hacerlo se convertiría en uno de los vehículos para circuito más radicales jamás creados. Con la base del Chiron, se ha llevado a cabo una transformación completa de su carrocería, añadiendo múltiples cambios orientados a mejorar su aerodinámica, como son las grandes tomas de aire del frontal, la situada en el techo, la enorme aleta dorsal o el incluso todavía mayor alerón trasero.

Además, el deportivo ha sido sometido a una estricta dieta de adelgazamiento gracias al uso de la fibra de carbono en su chasis monocasco, el titanio para dar forma a sus tornillos y otras superficies, así como a los frenos carbocerámicos. El resultado es un contenido peso de solo 1.240 kilos.

Esta cifra cobra todavía mayor relevancia cuando se une al hecho de que se ha potenciado su motor W16 hasta los 1.850 CV y los 1.850 Nm de par máximo, lo que hace que su relación peso/potencia sea de apenas 0,67 kg/CV.

Esto hace que, al menos según las simulaciones realizadas, el Bolide ponga sobre la mesa unas prestaciones estratosféricas: acelera de 0 a 100 km/h en 2,17 segundos y se pone a 200 km/h en 4,36 segundos. Tarda 7,37 segundo en llegar a 300 km/h, y solo 12,08 segundos y 20,16 segundos en alcanzar los 400 y los 5oo km/h. Las estimaciones de Bugatti apuntan a que sería capaz de completar una vuelta a Nürburgring, la vara de medir extraoficial del mundo del motor, en 5 min 23,1s.