El coche de seguridad que decidió el título de F1

La aparición del Aston Martin Vantage permitió a Verstappen ganar a Hamilton y proclamarse campeón.

Aston Martin

Foto: Aston Martin

El desenlace del Mundial de Fórmula 1 en Abu Dhabi no ha podido resultar más emocionante. De hecho, la coronación de Max Verstappen como nuevo campeón por delante de Lewis Hamilton queda pendiente de una apelación que podría presentar Mercedes.

El equipo del piloto británico considera que el proceso de reagrupamiento tras el coche de seguridad, cuya presencia en pista fue provocada por un accidente de Latifi, fue irregular y así lo expresó en una primera reclamación ante la Dirección de Carrera, que fue desestimada. Si la escudería alemana decide continuar adelante con su queja ante la Corte Internacional de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), la proclamación del campeón podría decidirse en los despachos.

En cualquiera de los casos, la aparición del coche de seguridad en los compases finales del último y decisivo gran premio de la temporada (los dos aspirantes al título llegaban empatados a puntos) resultó determinante para el desenlace.

El Aston Martin que en esta ocasión realizaba dicha tarea se retiró del circuito quedando solo una vuelta, que Verstappen aprovechó a la perfección, gracias a sus neumáticos nuevos, para doblegar a Hamilton y convertirse en campeón del mundo con solo 24 años.

Alternancia con Mercedes

El protagonismo del coche de seguridad y coche médico en la Fórmula 1 había recaído en Mercedes-Benz desde 1996. Esta temporada, los promotores del certamen decidieron alternar los coches alemanes con la novedad de los Aston Martin, la legendaria marca británica que se encuentra en proceso de relanzamiento.

Además de contar con una escudería en la parrilla, con monoplazas para Vettel y Stroll, el escaparate que supone la aparición en los circuitos de modelos comerciales sirve para apuntalar esa estrategia de reposicionamiento entre las marcas de lujo.

El primer SUV de Aston Martin, el DBX, se ha utilizado en varios grandes premios como vehículo de asistencia médica rápida, mientras que la responsabilidad de actuar como coche de seguridad recae en el cupé deportivo Vantage.

La serie especial F1 junto al coche de seguridad de los grandes premios.Foto: Aston Martin

La marca británica lanzó en marzo una serie limitada del modelo con la denominación F1 Edition, inspirada en la versión utilizada en la F1 y disponible tanto con carrocería cupé como roadster (descapotable). Siempre con el clásico color verde que identifica a Aston Martin, utiliza un motor de procedencia Mercedes-AMG, de ocho cilindros configurados en V y una potencia de 535 CV (25 CV más que el convencional).

La caja de cambios cuenta también con relaciones específicas, más cerradas para que las aceleraciones resulten fulgurantes, con lo que realiza el 0-100 km/h en 3,6 segundos, mientras que su velocidad máxima es de 315 km/h.

El Aston Martin Vantage tiene unas prestaciones destacables.

Preparación específica

Sobre la base del Aston Martin Vantage, el coche de seguridad cuenta con una preparación específica para realizar tan comprometida labor. Rodar delante de los monoplazas más rápidos del mundo nunca es tarea fácil, así que las unidades destinadas a ello, también los Mercedes con los que se alterna, se adaptan con sus correspondientes señales luminosas, equipo de comunicación y medidas de protección de los ocupantes.

A su volante se encuentra Bernd Mayländer, expiloto de campeonatos como el DTM alemán o el Mundial de GT y sobradamente cualificado para enfrentarse a la responsabilidad de pilotar al límite el coche de seguridad. Porque esas condiciones extremas para un automóvil de serie, incluso de este nivel, apenas sirven para que los F1 rueden al mínimo de sus posibilidades.  

En la versión de serie aparece unos asientos deportivos tapizados en una combinación de cuero y tejido Alcantara, con algunos detalles en verde lima que refuerzan su deportividad. La calidad del equipamiento y los acabados son los propios de un automóvil de este posicionamiento, que supera los 170.000 euros.

El interior de la serie especial F1.

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Raúl Romojaro

Una vida sobre ruedas. De piloto (malo) de motocross a periodista deportivo en Diario AS, incluyendo una década en los grandes premios de MotoGP. Apasionado de los coches y las motos, en más de 30 años ha tenido el privilegio de probar unos cuantos cientos de unos y de otras. Ahora, subdirector en Prisa Motor.

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