La empresa Kleanbus ha desarrollado un modo de convertir un antiguo vehículo en uno respetuoso con el medioambiente y libre de emisiones. Por el momento, ha investigado la aplicación en autobuses.
En el proceso de desmontar un motor diésel y reemplazarlo por uno eléctrico intervienen varios pasos, que van desde sacar todos los líquidos del automóvil hasta instalación del software correspondiente y la verificación de la instalación.
Los pasos son similares en todos los vehículos, pero con diferencias en función de su tipo de motor, la transmisión, la dirección, el frenado o los sistemas eléctricos.
Incluso hay que tener en cuenta la estética y funcionalidad dentro de la cabina del conductor y el área de pasajeros. Además, el tablero también se actualiza con tecnología avanzada y moderna.
Kleanbus intenta que las modificaciones del chasis y la carrocería del vehículo se reduzcan al mínimo, aunque se puede realizar una reforma interior y exterior para modernizar el autobús, si el cliente lo desea. De esta forma, los autobuses se rejuvenecen para convertirse en vehículos más limpios y silenciosos para las ciudades.