En cuestión de segundos, la vida de un oficial de Policía podría haber cambiado para siempre. Un agente de Virginia (Estados Unidos) se encontraba en el arcén con un BMW Serie 7 en una de las rutinarias paradas de tráfico. Al otro lado de la carretera, el conductor de un BMW M3 negro que se aproximaba a gran velocidad perdió el control del vehículo y colisionó contra el Serie 7. El policía se salvó por muy poco.
Las imágenes fueron captadas por la cámara del interior del vehículo policial, y muestran que el oficial estuvo a punto de ser arrollado, en este caso, por un joven de 17 años. Tanto los reflejos del policía como la posición en la que se encontraba el coche detenido hicieron que el comisario se salvara de un fatal desenlace.
Los tres individuos implicados en el incidente no sufrieron heridas graves, pero el conductor del Serie 7 fue trasladado al hospital del condado de Fairfax, en Virginia.