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Cuando hay un animal salvaje cerca de un coche, es fundamental mantener la calma para evitar que se enfurezca y destroce todo a su paso. Sin embargo, hay ocasiones en las que resulta complicado contenerlos, dada su naturaleza impulsiva. Esto es lo que ocurrió con un rinoceronte blanco en la provincia sudafricana de Cabo del Norte.
El animal iba a ser trasladado a otro lugar para poder liberarlo. Cuando llegó a su destino y despertó, comenzó a embestir con fuerza el coche en el que se encontraba. Los humanos que lo acompañaban se sorprendieron por su reacción, ya que el rinoceronte blanco se caracteriza por ser más calmado y apacible que el rinoceronte negro.
Aparca su coche y cuando regresa encuentra su vehículo con el espejo destrozado y un mensaje difícil de creer Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram
