La mujer que sacó gran provecho a la garantía de su coche: la firmó de por vida y condujo casi un millón de kilómetros

Rachel Veitch, propietaria de un Mercury Comet Caliente, tuvo su vehículo durante 53 años, hasta que dejó de ponerse al volante a la edad de 93.

garantía coche por vida
Rachel Veitch fue protagonista de varios documentales que dieron cuenta de su hazaña. | Youtube

Rachel Veitch, una mujer original del condado de Eire, en Pensilvania (Estados Unidos), fue la orgullosa conductora de un Mercury Comet Caliente durante toda su vida. Nunca cambió de coche y uno de los motivos fue la garantía de por vida que firmó en el momento de la compra.

La garantía de un coche es un aspecto vital, ya que cubrirá las posibles reparaciones durante los primeros años tras la compra. Actualmente, algunas marcas ofrecen hasta diez años de garantía, pero lo que consiguió Rachel es casi impensable en los tiempos que corren.

Esta vecina de Pensilvania compró su coche en 1964. En aquel momento, para mejorar las ventas y animar a que los conductores mantuvieran sus coches durante largos periodos de tiempo, los concesionarios ofertaban garantías de por vida.

Rachel Veitch hizo un buen uso de esta. Condujo su Mercury Comet Caliente durante 900.000 kilómetros y todas las reparaciones y sustituciones que le practicó al coche las hizo reclamando ese derecho que le daba la garantía de por vida.

Llegó a cambiar la batería del coche hasta en 18 ocasiones, de las que no abonó ni una sola. Cuando le exigían pagar algún trabajo en el taller, ella enseñaba el documento firmado que le eximía del pago. Si bien tuvo que comprar algún repuesto que otro para su coche, Veitch procuró adquirir aquellos que también ofrecieran garantía de por vida.

Rachel Veitch y su Mercury Comet Caliente

Rachel Veitch condujo su Mercury hasta la edad de 93 años y fue la protagonista de varios documentales y reportajes de medios estadounidenses que quisieron dar cuenta de su hazaña. La mujer, alegre, presumía al volante de su coche del kilómetraje que le había hecho, sin tan siquiera tener que cambiar el motor.

Lamentablemente, Veitch falleció el pasado 2017, a la edad de 98 años. Solo estuvo cinco sin ponerse al volante de su coche. Ahora, el Mercury Comet Caliente de Rachel Veitch está expuesto en un pequeño museo de automóviles de Wisconsin (Estos Unidos). Eso sí, la garantía de por vida del coche expiró tas el fallecimiento de su longeva propietaria y el posterior cambio de propiedad.

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