En los años noventa, al levantar la mano en las calles de Nueva York lo normal era ver detenerse, con suerte, un Ford Crown Victoria o un Chevrolet Venture. Y aunque no eran los únicos modelos (también había otros como los Toyota Sienna y Honda Odissey), desde entonces se convirtieron en íconos amarillos de la ciudad y han aparecido en infinidad de películas y series de aquella época.
Más tarde fueron sustituidos por modelos más actuales entre los que destacan el Ford Escape, el Toyota Camry o Volkswagen Jetta y, como representante de la transición energética, el híbrido Toyota Prius.
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Ahora el proceso se consuma y la empresa de movilidad Gravity anuncia una importante flota de vehículos 100% eléctricos. En concreto serán 50 taxis, y los primeros que han entrado en servicio han sido los Ford Mustang Mach-E. Más tarde se incorporarán otros Tesla Model Y, que también han pasado las inspecciones necesarias por parte del organismo pertinente (New York City Taxi and Limousine Comission).
Pantalla para los pasajeros de los taxis
Por el momento, el Ford Mustang Mach-E, decorado con la característica pintura amarilla, ya se ha convertido en una nueva imagen de la ciudad estadounidense y efectúa su recarga en diferentes puntos de la gran urbe, algunos compartidos con otros operadores. Al respecto, Gravity planea abrir a principios de 2022 un gran centro de recarga en la misma isla de Manhattan para así poder ampliar el radio de acción de sus prestaciones.
Los nuevos taxis eléctricos no solo aportarán un servicio sin emisiones contaminantes. Además, brindarán a sus clientes una experiencia diferente en sus desplazamientos al disponer de un interior y unos asientos traseros especialmente adaptados para un acceso y un viaje más cómodos.
También en las plazas posteriores Gravity ha añadido a disposición de los pasajeros una gran pantalla central de 22 pulgadas que, entre otras cosas, les permitirá ajustar la climatización, reproducir música, ver vídeos, hacerse y enviar selfis o conocer su ubicación exacta y el tiempo restante para alcanzar su destino.
Otro detalle que mejora la experiencia, tanto en los Ford como en los Tesla, es un gran techo panorámico para ofrecer durante los desplazamientos la mejor perspectiva de la ciudad de los rascacielos. En cuanto a las tarifas, la empresa aplica los precios estándar de los taxis de Nueva York.
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