Suzuki renueva su gama deportiva de acceso

Dentro del mercado de las dos ruedas, las motos más vendidas siempre son escúteres de 125cc, modelos de fácil manejo y bajo coste pensados para circular por ciudad. Aunque son el formato más popular, los fabricantes también ofrecen alternativas para los pilotos que busquen otra experiencia de conducción, como es el caso de Suzuki y sus GSX-S 125 y GSX-R 125.

Desarrolladas sobre idéntica plataforma, son dos caras de la misma moneda: la primera es una moto sin carenado (naked), con un manillar alto y una posición de conducción más recta, pensada para lidiar con el tráfico urbano; la segunda es una deportiva, con semimanillar y una posición de conducción más agresiva, con carenado completo y un enfoque más dinámico.

Ambas comparten elementos como el chasis, el depósito de 11 litros de capacidad, llantas de 17 pulgadas, neumáticos de 90/80-17 M/C y 120/70-17 M/C o los frenos con ABS. Además, con una altura del asiento de 785 milímetros y un peso de 133 kilos, son modelos accesibles para todo tipo de pilotos.

También es común el motor, un bloque monocilíndrico de 125cc y cuatro tiempos que desarrolla 15 CV de potencia, cifra que hace que esté dentro de los límites del carné B de coche, por lo que cualquiera con tres años de antigüedad o más con dicha licencia puede conducirlas.

Suzuki apunta, además, que ha aplicado en ambos modelos tecnología desarrollada en sus hermanas mayores, algo que se refleja en la presencia del sistema de iluminación frontal con tecnología LED o en la instrumentación LCD multifunción.

Las Suzuki GSX-S 125 y GSX-R 125 ya se están disponibles en los concesionarios y con la oferta de lanzamiento tienen un precio de 4.095 y 4.545 euros, respectivamente.