El Lexus LBX recibe el espíritu de las versiones deportivas de Toyota

Lexus acaba de internarse en el segmento de los B SUV con el LBX, que ahora hace las veces de modelo de acceso a su gama. No ha tardado la marca nipona en desarrollar una versión de alto rendimiento que, aunque se ha presentado como prototipo, podría llegar a producción si la respuesta del público es la adecuada. Así es el Lexus LBX Morizo RR Concept.

La clave de esta variante está en su sistema de propulsión y es que la firma japonesa lo ha tomado prestado de su hermana, Toyota. Concretamente, se ha decantado por el motor que ya montan los Toyota GR Corolla (que no se vende en Europa) y Toyota GR Yaris (que no se vende en Estados Unidos).

Se trata de un propulsor de gasolina 1.6 turbo tricilíndrico que entrega una potencia de 305 CV y un par máximo de 400 Nm. Se asocia a una transmisión automática GAZOO Racing Direct de ocho velocidades, idéntica a la que el GR Yaris ofrece de manera opcional en su última actualización. Tampoco falta un sistema de tracción integral a las cuatro ruedas, pero Lexus no ha desvelado cuáles son las prestaciones del modelo.

Sí ha concretado que, además de en el motor, se han introducido mejoras en otras áreas: la carrocería, la suspensión y los neumáticos.

Puesta a punto deportiva

Respecto a lo primero, se aprecia su diseño algo más deportivo, pero la marca no ha optado por una radicalidad extrema. Se aprecia sobre todo un trabajo aerodinámico y entradas de aire de mayor tamaño que ayudan a optimizar la refrigeración.

En cuanto a la suspensión, tiene una puesta a punto específica, un tarado más duro y rebaja la altura en 10 milímetros, dejando al SUV en 1,53 metros de alto.

Por último, el calzado está formado por unas llantas de 19 pulgadas de diámetro que van envueltas en unos neumáticos de medidas 235/45 R19 y tras las que se encuentran unos discos de frenos ventilados que miden 18 pulgadas en las ruedas delanteras y 16 en las traseras.