Después de años de rumores, de posibles alianzas con marcas como McLaren o Magna Steyr, al final no habrá coche de Apple. La marca de la manzana ha decidido cancelar el proyecto Titan después de un desarrollo repleto de complicaciones (como apunta Bloomberg).
El equipo destinado al proyecto, formado por 1.000 personas, ha sufrido recortes con el despido de 120 integrantes, entre programadores e ingenieros, y los que quedan han visto que el objetivo de su trabajo ha cambiado. De crear un coche completamente nuevo, en Apple han rebajado sus expectativas y se dedicarán a desarrollar sistemas de conducción autónoma y semiautónoma, tanto elementos de software como de hardware.
En principio, la marca suministrará sus sistemas a otros fabricantes, aunque queda en el aire que en algún momento, a medio o largo plazo, decida retomar el camino de crear su propio vehículo.
Los rumores sobre el coche de Apple (llamado por algunos iCar, en un alarde de originalidad) venían de lejos y de vez en cuando se reforzaban con publicaciones en algún medio. El año pasado, The Wall Street Journal citó fuentes cercanas de la marca de Cupertino para asegurar que el vehículo estaría listo en 2019.
La información del llamado proyecto Titan siempre ha sido escasa y se ha basado en datos vagos. No obstante, movimientos de la empresa, como el fichaje de Doug Roberts, ex-Grupo FIAT-Chrysler, parecían indicar que tarde o temprano veríamos el coche de Apple.
La idea de la marca tecnológica buscaba rivalizar con el Google Car en conducción autónoma, aunque en ningún momento se aseguró, en realidad, que estuviera previsto hacerlo totalmente autónomo.
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