La Guardia Civil acaba de ampliar su parque móvil, ya que se ha hecho con 249 unidades del Seat León, la mayoría de ellas uniformadas con los colores del cuerpo de seguridad, pero también para formar parte de su flota de coches camuflados.
Todas ellas han sido adquiridas con la misma configuración: utilizan la carrocería familiar ST, que otorga un mayor espacio tanto para los pasajeros de las plazas traseras (a la altura de la cabeza) como en el maletero; tienen el acabado FR, que es el más deportivo de la gama y está en la cima de los niveles de equipamiento que ofrece el modelo, a la par con el Excellence; y montan el motor diésel 2.0 TDI de 150 CV y 340 Nm, que se combina con una caja de cambios automática DSG de siete velocidades.
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Se trata del bloque de gasóleo más potente que ofrece el compacto, aunque no el superior de la gama (hay un gasolina de 190 CV), suficiente para que alcance una velocidad máxima de 212 km/h, homologue un consumo medio de 4,5 l/100 km y unas emisiones de CO2 de 117 g/km. Eso sí, al tratarse de un motor diésel solo consigue la etiqueta medioambiental C.
Su dotación de serie es de lo más completa, como en el modelo convencional, pero añade elementos específicos para su función, como los sistemas de luces y aviso acústico, así como la radio y las antenas de comunicación.
Arantxa Esteban, directora de Ventas Especiales y Vehículos de Ocasión de Seat España, se ha referido a la tradición de la marca con los cuerpos de seguridad: “El Seat León ST nos brinda la oportunidad de retomar la confianza en nuestra marca por parte de las fuerzas del Estado, que apoyan al producto nacional tal y como lo hicieron durante años con modelos como el SEAT 124, 131, 132 y Exeo, entre otros”. Con la configuración elegida por la Benemérita, y sin contar el equipamiento extra específico que han recibido, el precio de estos Seat León arranca los 26.500 euros.
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