Autogas, una opción ahorradora

Autogas, una opción ahorradora

Si usted tiene un coche de gasolina y va a hacer más de 50.000 kilómetros a su vehículo, quizá le interese moverlo con gas. Pagará por kilómetro hasta un 30% menos, el motor será más silencioso y contaminará mucho menos. Se trata del autogas, más conocido como GLP (Gas Licuado del Petróleo).

Este combustible es un viejo conocido de taxistas y profesionales, pero con la subida de los combustibles y los gravámenes a los coches más contaminantes, se ha convertido en una alternativa rentable.

Lo primero es coger una calculadora y echar cuentas. La Asociación Española de Operadores de Gas Licuado de Petróleo (AOGLP) dispone de una calculadora online e su página web. La transformación del vehículo a autogas se puede realizar en cualquier coche de gasolina matriculado después de 2001 o que cumpla con la normativa Euro II o posterior. En los vehículos diésel, no es posible de momento. El coste de la adaptación está en torno a los 2.000 euros más IVA, e incluye la homologación por una ITV.




El uso de GLP no implica ningún riesgo adicional en caso de accidente



La operación es la siguiente: en el hueco de la rueda de repuesto se instala un depósito que, según versiones, cubica en torno a los 60 litros. La rueda se sustituye por un kit antipinchazos. El tubo de llenado llega hasta la boca original del vehículo y se instala al lado de esta, mientras otro tubo se encarga de llevar el gas al motor. Una centralita electrónica se encarga de controlar el proceso de alimentación y de pasar de gas a gasolina sin que nos demos cuenta.

Sí, porque el coche conserva su depósito de gasolina y puede moverse con ella cuando se acaba el gas o cuando el conductor decida a través de un interruptor en el salpicadero. Contabilizando las capacidades de ambos depósitos la autonomía puede pasar fácilmente de los 1.000 kilómetros.

Pero no todo son ventajas. La red de repostaje de este carburante es reducida, con unos 120 puntos en toda España concentrados en las grandes ciudades. Según José Luis Blanco, director general de AOGLP, “a finales de 2012 habrá 80 surtidores más hasta alcanzar los 200 y en los próximos años, el ritmo de crecimiento será aún mayor hasta alcanzar el millar en 2015”.

También hay que tener en cuenta que la potencia es un 5% menor y que en la mayoría de los casos se pierde la garantía del fabricante si la hubiera, aunque se puede adquirir un vehículo nuevo que ya traiga instalado el sistema en origen y con su consiguiente garantía de fábrica.

Además estos vehículos se benefician del Plan PIVE, con 2.000 euros de ayuda a la compra.

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