Durante los próximos días, España experimentará un fenómeno conocido como lluvia de sangre, causado por la llegada de la borrasca ‘Olivier’. Esto se produce cuando las precipitaciones arrastran polvo sahariano, dándole al agua un tono rojizo.
Todo indica que este fenómeno se extenderá entre el jueves y viernes, con la entrada de precipitaciones acompañadas de calima (especialmente en el sur y centro peninsulares).
Más información
Calima: ¿cómo limpiar el coche sin dañarlo?
Cuando se produce un fenómeno como este, el coche se debe limpiar a fondo, ya que la arena se incrusta más a medida que pasan los días y puede causar daños irreparables en la carrocería, los cristales o los faros.
Estos son los consejos básicos:
- Utilizar aire a presión. Es el primer paso para una correcta limpieza. Puede valer un hinchador doméstico o el compresor de una gasolinera, pero es imprescindible eliminar toda la arena antes de echarle agua.
- Usar agua a presión. Una vez eliminada la arena, se utiliza agua a presión para que todo quede resplandeciente, pero sin frotar. Debe hacerse así, pues a poco que haya quedado algún granito de arena, si se frota con fuerza se arañará la carrocería. Por eso mismo es aconsejable no utilizar trapos ni esponjas duras.
- Limpiar los bajos. En la medida de lo posible, es ideal darle un buen repaso a los bajos del coche, grandes olvidados de la limpieza. En caso de no disponer de unas borriquetas para el automóvil (algo por cierto muy económico) la solución es llevarlo a un taller de lavado. Tomando, eso sí, algunas precauciones.
- Evitar rodillos con cerdas de plástico. En el túnel de lavado, hay que elegir el programa más largo de lavado y evitar rodillos con cerdas de plástico. Para rizar el rizo, se pueden utilizar tratamientos de agua osmotizada, que elimina el cloro, la cal y otras sustancias que pueden dejar manchas en el coche.
- Limpieza interior. No hay grandes secretos: aspiradora, precisión y paciencia.

Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram