Hace un tiempo BMW presentó el M235i Performance, la versión más deportiva del Serie 2 para calle. Ahora, la marca ha presentado en Las Vegas su homónimo para circuito, el M235i Racing, que no será matriculable.
Comparte el propulsor del Performance, un motor 3.0 TwinTurbo de seis cilindros en línea que entrega una potencia máxima de 333 CV y par motor de 450 Nm. El bloque se combina con una transmisión secuencial de seis velocidades y manda la fuerza al eje trasero.
Cuenta además con un diferencial autoblocante trasero mecánico y con todo tipo de tecnología para mejorar su respuesta: control de tracción, de estabilidad, ABS, tarado más duro para la suspensión…
Para aprovechar al máximo el apartado mecánico, M Performance le ha instalado un kit de carrocería aerodinámico hecho en su mayor parte en fibra de carbono: splitter delantero, pasos de rueda con salidas de aire, faldones, difusor y un alerón.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.