Algunas de las estrellas del Salón de Shanghái 2021

Este prototipo eléctrico propone una mecánica de potencia desconocida, pero con dos motores, tracción 4x4 y una aceleración de 0 a 100 km/h en 3,5 segundos. Pero lo que más ha llamado la atención de este concepto es su parecido con varios modelos de Porsche, desde los faros del 911 a la silueta de la berlina Panamera.

Este caso es más flagrante que el anterior, pues aquí el homenaje es todavía más descarado, tomando como base el diseño del Volkswagen Beetle original, aunque adaptado a una carrocería de cuatro puertas. Emplea una mecánica 100% eléctrica, pero, como suele ser habitual, sin concretar su potencia ni autonomía.

Esta propuesta, en cambio, no recuerda a ningún modelo conocido. Más allá de por su peculiar diseño, incluidas unas puertas de apertura deslizante, lo que hace destacar a este prototipo robotizado es que funciona como un purificador de aire sobre ruedas, descontaminando el aire exterior.

Esta versión del pick-up Cannon tiene un enfoque más deportivo y campero, con bajos reforzados, suspensión elevada, snorkel y parrilla específica y gráficos en la carrocería. Se puede apreciar cierto parecido con los Raptor de Ford y el hecho de colocar en el nombre ‘Baja Snake’, no ayuda a ahuyentar las semejanzas con el modelo estadounidense y sus variantes Shelby, cuyo logo es una serpiente.

Esta gran berlina busca dar un giro de tuerca al lujo. En el exterior llaman la atención las luces de led, que recuerdan a las de Bentley, y los numerosos cromados, que gustan al público chino. Y en el interior carece de volante, porque tiene una conducción 100% autónoma, y trata de ofrecer el máximo confort integrando asientos reclinables.

La resucitada marca británica (ahora al amparo de la china SAIC) proponer un descapotable biplaza de corte deportivo, con una mecánica sin emisiones capaz de llevarle de 0 a 100 km/h en menos de tres segundos y homologando una autonomía (estimada y optimista) de 800 kilómetros.

Otro modelo más a la lista de plagios chinos, pues este gran SUV de lujo toma prestadas sus líneas de diseño del Rolls-Royce Cullinan. Tiene tamaño XXL y un interior a todo lujo, y también una mecánica híbrida enchufable de la que de momento no hay datos. El cambio automático, eso sí, tiene nueve marchas.

El modelo más grande de la familia eléctrica de Volkswagen no llegará a Europa. Se trata de un SUV de 4,8 metros de longitud, con tres filas de asientos y que utiliza la misma plataforma MEB que sus hermanos menores, ID.3 e ID.4. Emplea un sistema bimotor de 301 CV, con tracción integral y la posibilidad de montar batería de 58 o 77 kWh, homologando en el mejor de los casos una autonomía de 588 kilómetros según el anterior ciclo NEDC, que ya no se utiliza en Europa.

Este prototipo descapotable está basado en el Mini EV de techo cerrado que ya está a la venta y que es uno de los coches eléctricos más baratos del mundo: unos 3.000 euros al cambio actual. Tiene dimensiones mínimas, menor incluso que los kei car japoneses, y un interior biplaza. Y también un cierto encanto difícil de concretar.