A partir de 2026, las balizas de emergencia o V-16 sustituirán a los clásicos triángulos para indicar que un vehículo ha quedado inmovilizado en la calzada o que su carga se encuentra caída sobre la misma.
Según un estudio difundido por Coyote, el 80% de los conductores aún no dispone de esta luz de emergencia. Para elaborar el informe han llevado a cabo 1.200 entrevistas telefónicas realizadas en toda España.
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En el mercado hay, actualmente, más de 200 modelos homologados y sus precios oscilan entre 30 y 50 euros. La transición hacia este sistema ha traído consigo un problema: los plazos de entrega de algunos comercios electrónicos.
Un buen ejemplo de ello es Amazon. Cuando en la casilla de búsqueda se introduce el concepto V-16, salen seis páginas con cientos de productos. Al entrar en la página de cada uno de ellos, el conductor debe fijarse en un importante detalle: el tiempo que tardará en llegar.

Los plazos de entrega de las balizas
Algunas de ellas avisan que llegarán entre dos fechas. El problema es que la segunda, que es el plazo límite para recibir el pedido, se va a 2026: en ese momento ya estará vigente la obligatoriedad de llevar una baliza de emergencia en el coche. En algunos casos hablan de enero y en otros, de febrero.
Para saber cuándo llegarán, en la página de la luz V-16, hay que fijarse en la columna de la derecha. En rojo, aparece este mensaje: “Este producto llegará después de Navidad”. Eso sí, el conductor no va a tener problema para encontrar una baliza a tiempo: muchas de ellas aseguran que “llegarán antes de Navidad”.
Un ejemplo es esta V-16, que llega entre el 17 y el 18 de diciembre y está de oferta: el precio final es de 34,90 euros, cuando antes costaba 59,99 euros. Así la describe el fabricante: “La baliza FASELIGHT proporciona una señalización de emergencia de alta visibilidad. Su potente luz es visible desde 1 kilómetros de distancia y 360 grados, asegurando que otros conductores te vean en caso de accidente o avería”.

¿Cómo debe ser una V-16 homologada?
Cabe recordar que estas balizas serán obligatorias a partir del 1 de enero de 2026. Deben colocarse en el techo del coche y emiten una luz intermitente visible en 360 grados. Además, cuentan con conectividad eSIM para comunicar la ubicación del vehículo a la plataforma DGT 3.0.
Gracias a ello, Tráfico puede alertar de la presencia de un vehículo detenido en los paneles informativos de las carreteras. También las aplicaciones de navegación reciben esa información y la muestran a los conductores.
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