Espíritu aventurero

El Skoda Scout, la variante campera de la ranchera Octavia Combi, tiene planteamiento de todocamino y sobresale por su polivalencia

Espíritu aventurero

Skoda pone a la venta la segunda generación del Scout, una versión derivada del Octavia Combi o ranchera, que se caracteriza por su planteamiento todocaminos: tiene estética campera, suspensiones elevadas, tracción 4×4 y capacidad para circular por tramos nevados y caminos de tierra. Mantiene el espacio del Octavia Combi, que ofrece un maletero enorme de 610 litros, y añade una mayor polivalencia de uso. Y está disponible desde 30.650 euros (sin descuentos, primas por financiación ni PIVE).

La personalización estética otorga una estética más robusta y se completa con ciertos cambios en el interior, como una decoración que puede sumar tonos marrones (salpicadero y tapicerías) a los negros convencionales.






La carrocería sube 3,1 centímetros y la altura libre al suelo crece hasta 17,1, una característica que junto a la tracción 4×4 permite rodar fuera del asfalto con mayores garantías que cualquier otro Octavia. Para los más aventureros se ofrece el paquete Robusto, una opción que añade protecciones suplementarias en los bajos de la carrocería.

El nuevo Scout se comercializa con tres motorizaciones. En gasolina está disponible el propulsor 1.8 TFSI de 180 CV, asociado al cambio automático DSG de siete relaciones, que homologa un consumo medio de 6,9 litros y cuesta 32.150 euros. En diésel, la oferta contempla dos alternativas sobre la base del motor 2.0 TDI de 150 y 184 CV: la primera con cambio manual y la otra con DSG, ambos de seis marchas. Los dos anuncian un gasto promedio oficial de 5,1 litros y tienen precios de 30.650 y 33.050 euros.

El equipo de serie reúne control de estabilidad, siete airbags, llantas de aleación, ordenador, sensor de lluvia y luces, radio/CD, USB, bluetooth y rueda de repuesto.

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