El último concierto de Anuel AA ha acaparado numerosos titulares, pero no por su actuación en sí. El puertorriqueño despedía su gira en el Madison Square Garden de Nueva York y el espectáculo pudo acabar en tragedia.
En una de sus actuaciones, Anuel hizo acto de presencia en un quad volador: en esta ocasión se decantó por una moto de cross para arrancar su concierto en Nueva York. Hizo su entrada con los primeros acordes del tema Con silenciador y avanzó por la pasarela.
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Cuando Anuel se bajó de la moto, al ser eléctrica, accionó el acelerador con la mano con la que sostenía el micrófono y perdió el control. Intentó, sin éxito, detenerla, pero el vehículo salió hacia delante cayendo al foso que separaba esa parte del escenario del público. Una zona donde estaba el personal de seguridad.
Críticas por la actitud de Anuel
La moto parece que golpeó, sin consecuencias, a uno de los miembros del equipo. Varios de ellos intervinieron para evitar que el vehículo causara un daño mayor. Tras controlarla, la recogieron y volvieron a colocarla sobre el escenario.
El incidente se saldó sin daños, pero la reacción de Anuel no pasó desapercibida. El cantante siguió adelante con su actuación como si nada hubiera ocurrido: incluso volvió a subirse a la moto cuando la recuperó. Las redes sociales se han llenado de comentarios criticando su falta de interés por lo sucedido y por lo que podría haber causado.
Anuel, El Alfa y un Bugatti Chiron Sport
Al final de esa pasarela le esperaba El Alfa con quien protagonizó una polémica relacionada, también, con el mundo del motor. Hace dos años, en 2021, Anuel presentó, junto a Osuna, su álbum ‘Los Dioses’.
El Alfa fue acusado de querer eclipsar el lanzamiento anunciando que llegaba, a su garaje personal, un Bugatti Chiron Sport. Sin embargo, un año después, en 2022, ambos cantantes difundieron una fotografía posando con el hiperdeportivo francés.
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Desde que aprendió a hablar y escribir, una de sus pasiones siempre fue contar todo lo que pasaba a su alrededor. Hizo las maletas y cambió Zaragoza por Madrid para estudiar Periodismo en la Universidad Complutense. Antes de graduarse, el mundo del motor se cruzó en su camino… y nunca lo ha abandonado.