Las ventajas de espacio y funcionalidad de los monovolúmenes, pero con una imagen y una conducción más cercana a los turismos. El 5008, el primer monovolumen compacto de Peugeot, mantiene el desahogo interior y sentido práctico que distingue a estos coches, pero se viste con una carrocería más baja y estilizada y ofrece también un dinamismo superior a lo habitual. Se lanzará en noviembre con precios desde 21.400 hasta 29.400 euros. Y por su planteamiento, está más próximo a modelos como los Renault Grand Scénic y Seat Altea XL que a otros como el Citroën C4 Grand Picasso, que es más alto y apuesta por el máximo confort de marcha sacrificando en parte la manejabilidad.
El 5008 incluye cinco butacas independientes y un maletero de 579 litros en 4,5 metros de longitud. Las dos últimas plazas (siete en total) son opcionales, cuestan 600 euros y se pueden ocultar en el piso del maletero cuando no se usan. Aparte de una gran flexibilidad, el interior aporta una presencia y calidad que definen un nuevo salto adelante en Peugeot. También hay detalles útiles como mesitas tipo avión, linterna extraíble, cortinas y una buena dotación de huecos para objetos. Todo ello, unido a una insonorización eficaz, hace más cómoda la vida a bordo. De momento habrá cuatro motores: 1.6 y 2.0 HDi turbodiésel, con 110 y 150 CV (desde 23.000 y 26.700 euros) y 1.6 y 1.6 turbo, con 120 y 156 CV (21.400 y 25.200). Los HDi gastan menos de seis litros, y los gasolina, menos de ocho. A partir de marzo de 2010, todos podrán montar cambios automáticos.
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