Si quieres un coche que se mantenga en buenas condiciones a lo largo de los años, elige un Lexus. No se trata de un lema publicitario ni de una opinión azarosa, sino de la principal conclusión del estudio anual de JD Power sobre la fiabilidad de los vehículos, clasificación que la marca premium japonesa encabeza un año más. Los resultados de este análisis dejan una segunda lectura: de modo global, las marcas populares (comandadas por Toyota) superan por primera vez a los fabricantes de lujo.
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El estudio está realizado en Estados Unidos, pero se trata de marcas de alcance mundial y sus resultados pueden extrapolarse a un mercado global. Una vez más (y van 30 ediciones), el informe mide los problemas experimentados durante los últimos 12 meses por los propietarios de coches de tres años. En este caso, por tanto, los datos hacen referencia a modelos comprados en 2016.
Después de una encuesta amplísima (participan casi 33.000 propietarios), los resultados se expresan en “problemas por cada 100 vehículos”. Lexus ocupa la primera posición por octavo año consecutivo, a pesar de que ha empeorado sus datos respecto a 2017: 106 problemas por cada 100 vehículos frente a 99 del año anterior. Por detrás, Porsche y Toyota empatan en el segundo lugar (108 por 100), seguidos por las estadounidenses Chevrolet y Buick. Entre las marcas peor valoradas aparecen Fiat, Land Rover y Volvo.
Los resultados de JD Power dejan ver un interesante panorama global: los modelos de marcas populares promedian 135 problemas por cada 100 unidades, frente a los 141 incidencias por cada 100 vehículos de lujo. El estudio cubre 177 contratiempos específicos agrupados en ocho categorías principales: exterior, controles y pantallas, asientos, interior, conducción, audio (comunicación, entretenimiento, navegación), climatización y motor.
La satisfacción de los propietarios ha mejorado un 4%, pero, mientras se dejan atrás viejos problemas, aparecen nuevos inconvenientes. “Los fabricantes están luchando con el reconocimiento de voz o el cambio automático. La fiabilidad es un factor determinante para que los clientes se mantengan leales a las marcas, que deben ayudar a los clientes a abordar estos puntos problemáticos en los modelos futuros», asegura vicepresidente de Global Automotive en JD Power, Dave Sargent.
Entre las nuevas quejas recurrentes aparecen los errores de conectividad por Bluetooth o tecnologías como los sistemas precolisión o los asistentes de aparcamiento. También, y cada vez más, ciertos ajustes de las transmisiones de 8, 9 y 10 velocidades: para mejorar la eficiencia, los cambios automáticos tienden a recurrir siempre a una marcha demasiado alta y en algunas ocasiones los automovilistas notan ciertas dudas del sistema por encontrar la marcha adecuada. Los conductores valoran el ahorro en combustible, pero también la suavidad de conducción.
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