Seguir la rutina de siempre quedándose en la zona de confort o arriesgarse a cambiar para triunfar. Este es el dilema al que se enfrentan todas las marcas de automóviles cada vez que crean un nuevo modelo. Pero hoy, 33 años y 5,4 millones de Seat Ibiza después, se ha desvelado en Barcelona la quinta generación del utilitario español, y por primera vez en todo este tiempo, lo que ha mostrado Luca De Meo, presidente de la marca, en la remodelada Cúpula de Las Arenas de Barcelona, es el Seat más ambicioso de la historia. Y es que, al menos a priori y antes de probarlo, reúne argumentos suficientes para situarse entre las referencias a superar en su categoría. La empresa prevé producir 150.000 unidades al año del nuevo modelo destinadas a los mercados de todo el mundo, que podrían llegar a las 200.000 sumando las correspondientes a la próxima variante SUV, el Arona.
El nuevo Seat Ibiza saldrá a la venta en junio, en principio con un motor 1.0 turbo de tres cilindros de gasolina y dos potencias: 95 y 115 CV. En septiembre se lanzará el 1.0 TGi de gas natural comprimido (GNC) de 90 CV, lo que le convertirá en el primer utilitario en ofrecer este combustible, y a final de año llegará el turbodiésel 1.6 TDi en versiones de 80, 95 y 115 CV, y también un nuevo 1.5 TSi de gasolina con 150 CV. Entretanto, y hasta que salgan las versiones 1.6 TDi del nuevo modelo, los diésel actuales se seguirán vendiendo con la carrocería de ahora para intentar no perder ventas frente a los Renault Clio, Volkswagen, Peugeot 208, Opel Corsa, Ford Fiesta y Citroën C3, sus principales rivales.
Los nuevos Ibiza llevan cambio manual de cinco marchas hasta 95 CV y de seis cuando superan esa potencia. Y se ofrecen también con cambio automático DSG de siete velocidades y cuatro acabados: Reference, Style, FR o deportivo y Xcelence.
LOS CINCO PUNTOS FUERTES DEL IBIZA V 201
1. Chasis MBQ AO más rígido y ligero
Para empezar y quizá lo más importante, estrena la nueva plataforma o chasis MQB AO del grupo VW para utilitarios, lo que equivale al suelo del coche sobre el que se montan los demás elementos mecánicos. Y como es de última generación, utiliza más aceros especiales para reducir el peso y mejorar a la vez la rigidez, la clave para ofrecer una buena estabilidad sin sacrificar el confort por tener que adoptar suspensiones duras. Además, el nuevo chasis lleva las ruedas más cerca de las esquinas (tiene 9,5 centímetros más de distancia entre los dos ejes) otro factor que también mejora el comportamiento y la sensación de consistencia, aparte de aumentar la habitabilidad
2. Un diseño potente y mucho empaque
Mide casi lo mismo por fuera, 4,05 metros de largo, pero es nada menos 8,7 centímetros más ancho, gracias a la nueva plataforma MQB AO. El resultado es una imagen con más presencia que le hace parecer mayor a sus rivales. Y se acerca mucho a la imagen del León, su hermano mayor, pero con un diseño más moderno y deportivo. Así, destaca la fuerza del frontal, muy ancho (seis centímetros más en las vías delanteras), pero tanto la vista lateral como sobre todo la zaga, están muy conseguidas.
3. El utilitario más amplio
Otra consecuencia de la nueva plataforma MQB AO. El aumento de la anchura y la distancia entre los dos ejes permite ampliar también el espacio interior, lo que situará al nuevo Seat Ibiza como referencia en su tamaño frente a los Clio y Polo, sus rivales mejor dotados en este aspecto. Aparte de ser 4,2 centímetros más ancho por dentro, ofrece 3,5 centímetros más de espacio para las piernas en las plazas traseras y 1,7 más de altura para poder alojar adultos altos sin tocar en el techo.
4. Maletero récord
Tiene 335 litros de capacidad, nada menos que 63 litros más que el modelo anterior, por encima de un 20% más y a la altura de muchos familiares compactos tipo VW Golf. El nuevo Seat Ibiza aporta el maletero récord de la categoría (supera los 330 litros del Skoda Fabia), lo que refuerza sus argumentos en el uso familiar.
5. Lo último en seguridad y conectividad
Aparte del equipo de serie obligatorio en seguridad, ya con control de estabilidad ESP y sensor de presión de neumáticos, el Seat Ibiza puede incorporar soluciones avanzadas como el control de la distancia de seguridad con frenada automática de emergencia en ciudad o Front Assist, el Traffic Jump Assist, que resulta similar a un piloto semiautomático para atascos, o el regulador de velocidad de crucero con radar antichoque ACC.
En la conectividad sucede lo mismo y, aparte de una superficie de carga inalámbrica que permite cargar el móvil sin cables, la nueva pantalla táctil central de ocho pulgadas incluye un sistema multimedia y de conectividad más completo, con protocolos de conexión Car Play y Android Auto (para terminales Apple y Android, respectivamente) y Mirror Link, una función ‘espejo’ que reproduce en la pantalla del coche la organización de iconos que se tenga en el móvil.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, Twitter o Instagram