El truco más viral: por qué cada vez más coches llevan una pinza de madera en el aire acondicionado

Los trucos para el mantenimiento del coche siempre vienen bien. En este caso, un buen ambiente en el habitáculo resulta siempre agradable, especialmente cuando comienza el calor y los olores son más intensos, especialmente los menos amables.

Por eso, en EL MOTOR han llamado la atención de los lectores esta semana dos trucos que ayudan a combatir los peores efluvios. La gracia de esto es que solo se necesitan objetos que se encuentran en casa y que no requieren mayor inversión: un simple corcho de una botella y una pinza para colgar la ropa. ¿En qué consisten?

La pinza de madera en el aire acondicionado

El procedimiento para que una simple pinza ayude a eliminar olores del coche es muy sencillo. Basta con escoger un aceite esencial que sea del agrado del conductor y rociar unas gotas sobre la madera. Una vez la pinza esté impregnada, bastará con colocarla en la rejilla del aire acondicionado del coche.

Mejor si se agarra en una de las salidas de ventilación laterales, para que no moleste verla en medio del salpicadero y no estorbe a la hora de, por ejemplo, manipular la pantalla central o abrir la guantera.

Por sus características, la madera absorberá inmediatamente el aceite. Al dejar la pinza en la rejilla de salida del aire acondicionado, esta irá liberando lentamente el aroma elegido. Cuando se active el climatizador, el olor será más intenso. 

El corcho de la botella como ambientador

Uno de los usos que se le puede dar al corcho de una botella de vino es el de ambientador. Entre las características de estos tapones destaca el hecho de que absorben olores, algo que será muy útil para mantener un buen aroma dentro del vehículo.  

Los pasos a seguir para crear este ambientador casero para el coche con un corcho son romperlo un poco o abrirlo y rociarlo con una colonia o un aceite esencial. Se puede dejar en cualquier parte, como en un pequeño recipiente en los huecos que hay entre los asientos delanteros.

Si se prefiere, se le puede pasar una cuerda y colgarlo del retrovisor interior del coche. De escoger esta opción, habrá que tener cuidado, ya que si obstaculiza la visión del conductor podría llegar a ser motivo de multa. También se puede cortar el corcho de la botella en pequeños círculos y colocarlos en las rejillas del aire acondicionado.