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Si cualquier conductor es consciente, o debería, de la trascendencia que los neumáticos tienen para el comportamiento y la seguridad de su vehículo es fácil adivinar las exigencias que los propios fabricantes de automóviles plantean para la elección del equipo original de sus modelos.
Las marcas suelen contar con varios proveedores para disponer de las cubiertas que montan en sus coches al salir de la fábrica como componente de serie. Siempre buscando la máxima calidad del producto, su fiabilidad, resistencia y buen comportamiento en cualquier circunstancia. Un compromiso que no es sencillo de alcanzar y que no satisfacen todos los productos, tan sólo los de primer nivel se encuentran en condiciones de alcanzar la excelencia que exige un proceso de selección que puede llegar a durar varios años.
Las marcas de coches y las de neumáticos trabajan estrechamente para definir un estricto pliego de condiciones que debe cumplir el producto. En primer lugar, es obvio, que el neumático se adapte a las propias características del vehículo: poco tiene que ver un utilitario de escasa potencia con una berlina de altas prestaciones o uno de esos grandes SUV tan de moda. Su dinámica, prestaciones o peso condicionan los compuestos y las carcasas necesarias, con lo que el proveedor debe disponer del producto preciso para cada caso.
Los neumáticos aspirantes se someten a un exhaustivo programa de pruebas en todo tipo de condiciones, para verificar que sus características se adaptan a las necesidades del modelo en cuestión. Los ensayos se realizan en circuito cerrado, en carretera, incluso fuera del asfalto cuando es necesario, en diferentes situaciones meteorológicas y comprobando parámetros como su maniobrabilidad, estabilidad en curva, capacidad de frenada en seco y en mojado, resistencia a la rodadura, rumorosidad y también su influencia en los consumos de combustible.
No es sencillo, por tanto, que un neumático supere con éxito tan exigente proceso y sólo algunos fabricantes de primera calidad disponen de una oferta de productos satisfactoria en este sentido. Es el caso de Hankook, que se ha convertido en uno de los principales proveedores del sector de la automoción y además en todos los segmentos del mercado.
En concreto, facilita sus neumáticos como primer equipo a 312 modelos de 45 marcas, algunas tan prestigiosas como Audi, BMW, Mercedes o Porsche, aunque no menos importante es la presencia de sus cubiertas como dotación original en otras generalistas tan populares como Peugeot, Skoda, Seat, Citroën, Ford, Hyundai, Mazda…
