Qué combustible es el E85 y qué coches pueden usarlo

El combustible E85, también denominado etanol, se está posicionando como una alternativa a los combustibles tradicionales, diésel y gasolina. Con las leyes anticontaminación sobrevolando el mercado automovilístico, los fabricantes de coches y las empresas petrolíferas buscan combustibles más eficientes y menos contaminantes.

Se trata de que entre todos los actores del sector consigan alargar al máximo la vida de los defenestrados motores de combustión interna. Una caducidad que tiene fecha. Según la norma aprobada por el Parlamento Europeo, en el año 2035 los motores térmicos dejarán de poder venderse en todo el territorio de la Unión.

Las compañías petrolíferas continúan investigando los combustibles neutros (e-fuels), que reciben también el nombre de ecológicos por no haber dejado huella de carbono en la atmósfera en su obtención, aunque por el momento el precio del litro es prohibitivo. Por eso, otros combustibles como el etanol están posicionándose como una opción.

Carburante E85

El etanol o alcohol etílico es un producto de origen vegetal que se obtiene destilando los hidratos de cereales como maíz, trigo o cebada; y de cultivos con alto contenido en azúcar como la caña de azúcar o la remolacha. Una vez obtenido el etanol, que es un alcohol puro, se mezcla con la gasolina en diferentes proporciones.

En los surtidores de las gasolineras se puede comprobar que existen diferentes nomenclaturas: E5, E10, E85 o E100. La letra E pertenece al etanol y el número a la cantidad en la que se encuentra disuelto en cada litro de gasolina. En el E5, por ejemplo, solo hay un 5% de etanol y un 95% de gasolina.

Por su parte, el E85 está formado, por una gran parte de etanol, el 85% y solo por un 15% de gasolina. Convirtiéndolo en un carburante más sostenible porque reduce considerablemente las emisiones de NOx, de monóxido de carbono y que, además, no produce azufre. 

Qué motores lo pueden usar

En principio solo las mecánicas denominadas de combustible flexible (FFV por sus siglas en inglés) están preparadas para acoger tanto la gasolina como las mezclas de gasolina y etanol en altas concentraciones. Cuando un motor no está preparado para acoger biocombustibles, únicamente debe ceñirse al etanol en bajas concentraciones: E5 y E10.

Si el motor del vehículo no es un FFV, añadirle el carburante E85 puede provocar serias averías, ya que es altamente corrosivo y puede afectar a varias partes del automóvil. También alteraría el consumo de combustible significativamente.

Ventajas e inconvenientes del E85

Claramente, el etanol para los motores de combustión interna se puede convertir en una alternativa a los coches eléctricos. Además, la ventaja más clara se encuentra en las bajas emisiones de gases contaminantes a la atmósfera y en la reducción del uso del petróleo, el E85 solo incorpora un 15% de gasolina. 

En cuanto a los inconvenientes, el más evidente es el bajo número de surtidores que dispensen este combustible. En España hay actualmente solamente cinco estaciones de servicio que ofrezcan Bioetanol E85 o E100. Así mismo, al no ser apto para todos los motores, habría que asumir la inversión que suponen por las modificaciones. El precio del equipo de conversión se sitúa alrededor de los 1.300 euros.

Para concluir, el litro de combustible a día de hoy es de 1,80 euros el litro, es decir, más alto que el resto de los combustibles convencionales.