La imagen protagonizada por conductores españoles y portugueses cruzando la frontera en busca del combustible más asequible es habitual: cuando en uno de los dos países suben los precios, las filas interminables surgen al otro lado. Teniendo en cuenta que estas variaciones son constantes, ¿dónde compensa echar gasolina: en España o en Portugal?
Para todos aquellos que, este verano, van a moverse entre ambos países o cerca del límite que los separa, es fundamental saber qué gasolineras son las más baratas. Hoy en día, conviene llenar el depósito en España porque los precios son inferiores: llenar el depósito antes de pasar al país vecino puede traducirse en un significativo ahorro.
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Cada semana, Europa publica los precios medios de la gasolina y el diésel en los diferentes países. Echando un vistazo a los últimos boletines petroleros, el combustible es más barato en España que en Portugal: las diferencias, que son más palpables en la frontera, oscilan entre un 10 y un 15%.
El precio de la gasolina en España y Portugal
Si se traduce esos porcentajes a unidades monetarias, el litro de combustible en España es, de media, entre 10 y 20 céntimos más barato. Estas cifras, no obstante, dependen de las fluctuaciones. Así las cosas, teniendo en cuenta los últimos datos disponibles (17/07), el litro de gasolina en España cuesta 1,602 euros, mientras que en Portugal es de 1,697 euros. La diferencia es de nueve céntimos.
En el caso del diésel, la distancia entre ambos países es semejante: ocho céntimos. El litro de diésel tiene en España un precio medio de 1,453 euros y en Portugal de 1,535 euros. Así las cosas, el precio de la gasolina y el diésel están por debajo de la media de la Unión Europea y de la zona euro:
- Gasolina: 1,738 euros / 1,794 euros.
- Diésel: 1,794 euros / 1,617 euros.
¿Es igual la gasolina en España y en Portugal?
Las diferencias entre el combustible de España y el de Portugal se reducen a su coste: la calidad es parecida en ambos países. Entonces, ¿por qué es más cara en el otro lado de la frontera? La razón hay que buscarla en factores como los impuestos, los costes de producción y distribución o la demanda y la oferta de cada mercado.
Hay que tener en cuenta que la fiscalidad en Portugal es más elevada: allí el IVA es del 23% frente al 21% español. En el caso de la gasolina, los impuestos pueden llegar a representar la mitad de su precio final: en el diésel suponen entre un 40 y un 45%. Razón por la que muchos conductores lusos llenar el depósito en las estaciones de servicio de la frontera.
Los hay, incluso, que cambian de país para llenar garrafas. Una práctica tan habitual que, en su momento, Portugal sólo permitía llevar un recipiente de 20 litros por vehículo. Cabe recordar que, en España, los conductores particulares únicamente pueden transportar 60 litros de gasolina y 240 de diésel. Y siempre en envases homologados.
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