El mundo de los coches, en el diccionario: las nuevas palabras aceptadas por la RAE

La Real Academia Española trata de evolucionar al mismo tiempo que lo hace el lenguaje cotidiano. Aunque a veces le cueste un poco, al final acaba incluyendo nuevos términos y nuevos significados a palabras de toda la vida.

Ya se conocen los nuevos términos y significados que entrarán a formar parte de las páginas del diccionario el año que viene. Hay palabras de todas las temáticas, pero este año destacan los términos relacionados con el feminismo y la autodeterminación de género y con la ecología.

Así, hay nuevas palabras de la RAE que entran a formar parte del diccionario que están estrechamente ligadas con el mundo de la automoción. Muchos de estos términos son de sobra conocidos, pero ahora se podrán usar con carácter más oficial.

El ‘aquaplaning’ ya es oficial

Empezando por el primero en orden alfabético. Cuando se acerca el invierno o las temporadas de lluvias, los conductores se cansan de oír esta palabra. Se trata de ‘aquaplaning’. Su definición es la siguiente: “Deslizamiento incontrolado de un automóvil sobre una delgada capa de agua, la cual impide el adecuado contacto de los neumáticos con la calzada”.

Siguiendo en la lista de la RAE se encuentra la palabra biometano, “un gas compuesto mayoritariamente de metano, obtenido mediante un proceso de depuración del biogás”. Este combustible podría utilizarse como sustituto del gas natural en los coches con motor GNC o de GLP.

El siguiente término no es para nada nuevo, pero se incluye como una nueva entrada de significado en una palabra que ya está en el diccionario. Se trata de caballo de potencia o de vapor, un concepto sin el cual resulta imposible hablar de vehículos. La RAE incluirá las formas complejas y especifica las siglas (CV) en el diccionario del 2024.

Descarbonizar, nueva palabra

El nuevo diccionario incluirá también la palabra descarbonizar, que no deja de repetirse en el sector. Se contemplan dos definiciones. La primera entiende que descarbonizar es “reducir las emisiones de carbono, especialmente las que se producen en forma de dióxido de carbono”. También hay una segunda acepción, mecánica: “Limpiar la carbonilla generada en la combustión de un motor”.

No falta la adición de la forma compleja ‘huella de carbono’ a la entrada ‘huella’. La definición es “medida de la cantidad de gases de efecto invernadero producidos por las diversas actividades realizadas por un individuo, una comunidad
o una organización”. Innegablemente, es un término muy utilizado a día de hoy en el sector.

Por último, la RAE recoge entre sus nuevas palabras el término ‘motonieve’ que no es novedoso, pero ahora ya está reconocido. Se trata de “un vehículo de motor, provisto de esquís, usado para desplazarse sobre la nieve”.