El próximo sábado día 25 arrancará en Málaga la 73ª edición de la Vuelta a España y Skoda volverá a ser protagonista con sus automóviles de una de las tres grandes pruebas ciclistas del calendario internacional, junto al Tour de Francia y el Giro de Italia. La marca checa se convierte, por octavo año consecutivo, en el coche oficial de la competición, además de patrocinador del maillot verde que identifica al líder en regularidad.
Skoda moviliza cerca de 70 vehículos, con representación de prácticamente toda su gama: Superb, Superb Combi, Skoda, Kodiaq y Karoq. Serán los que utilicen desde el director de carrera a los miembros de la organización, pasando por los jueces y comisarios deportivos que velan por el correcto desarrollo de la competición.
El compromiso de Skoda con el ciclismo lo refrendan acuerdos similares con otros grandes eventos de este deporte, como el propio Tour de Francia o el Mundial de ciclismo en ruta. Una relación con la bicicleta que se remonta a los orígenes de la hoy empresa automovilística, cuando en 1895 sus fundadores, Laurin y Klement, abrieron un pequeño taller de reparación de bicis en la ciudad checa de Mlada Boleslav.
La Vuelta España 2019 recorrerá un total de 3.271 kilómetros repartidos en 21 etapas, 11 de ellas de montaña y media montaña, con jornadas de enorme dureza como las dos que se disputarán en Andorra.
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Una vida sobre ruedas. De piloto (malo) de motocross a periodista deportivo en Diario AS, incluyendo una década en los grandes premios de MotoGP. Apasionado de los coches y las motos, en más de 30 años ha tenido el privilegio de probar unos cuantos cientos de unos y de otras. Ahora, subdirector en Prisa Motor.