La tercera generación del Skoda Octavia llegará a España en marzo y define un salto de calidad en la marca checa del grupo Volkswagen (VW). Por fuera adopta un diseño con más carácter, por dentro es aún más amplio que su antecesor y, sobre todo, está mejor presentado. También comparte la base mecánica del último Golf (chasis, motores y cambios), lo que se traduce en un funcionamiento cómodo y refinado. Y, además, estrena motores de última generación que reducen los consumos (hasta 3,4 litros), viene de serie con siete airbags y puede incorporar en opción los últimos avances de seguridad, como el radar antichoque ACC. Pero todos estos avances no van a suponer un incremento en los precios, que aunque todavía no están definidos, serán prácticamente iguales a los de la generación actual: desde unos 16.800 euros.
El Octavia es el modelo más vendido de Skoda, que ha entregado más de 3,7 millones de unidades desde que lanzó la primera generación en 1996. El nuevo modelo crece en longitud y mide 4,65 metros de largo, nueve centímetros más, pero sobre todo comparte la nueva plataforma modular o MQB que han estrenado los A3 y Golf, aunque alargada 15 centímetros entre los ejes para ampliar el espacio interior. Esta solución aporta un funcionamiento mecánico exquisito, tanto de tacto de conducción como de rodadura, que sitúan a la berlina checa entre las más refinadas de su tamaño. Y la plataforma, junto con la utilización de materiales más ligeros, permite asimismo rebajar el peso hasta 102 kilos según versiones, lo que contribuye de forma decisiva a reducir los consumos y emisiones de toda la gama.
El nuevo diseño exterior adopta una silueta de cupé, con el techo cayendo por detrás para integrar el maletero, y suma detalles sofisticados, como los nervios que recorren el capó delantero, los faros con luces led o el trazo lateral que marca un hombro debajo de las ventanillas de las puertas. La zaga resulta algo más pesada, pero el conjunto ofrece una aerodinámica afinada, con un CX de 0,29. Y el resultado es una berlina de corte clásico, pero con un toque elegante y deportivo que aporta cierto carácter a la imagen y el diseño de Skoda.
El interior también muestra un salto de calidad, con un salpicadero más moderno y atractivo, acabados más precisos y plásticos mejores. Pero el Octavia 2013 marca la diferencia por su amplitud y ofrece unas plazas delanteras con buenos asientos y unas traseras con un espacio para las piernas récord en coches de su tamaño. Y mantiene su práctico portón de carga, que da acceso a un maletero también récord de 590 litros, 30 litros más que en el modelo saliente.
El nuevo Octavia saldrá a la venta en España con tres motores de gasolina y cuatro turbodiésel. En marzo llegarán los turbo de gasolina 1.2 TSi de 105 CV, 1.4 TSi de 140 CV y 1.8 TSi de 180 CV. Y también los turbodiésel 1.6 TDi de 105 CV y 2.0 TDi de 150 CV. En junio saldrá el 1.6 TDi de 90 CV y, a final de año, aparecerá la versión Green Line o de mayor eficiencia, con un 1.6 TDi de 110 CV que, según la marca, tendrá un consumo medio de solo 3,4 litros (89 g/km de CO2), una cifra sobresaliente para una berlina de este tamaño. Los cambios serán manuales de seis marchas y automáticos secuenciales DSG. Y toda la gama incluirá de serie siete airbags (uno de rodilla para el conductor), ABS, control de estabilidad ESP con función multicolisión (frena el coche a fondo cuando se recibe un impacto trasero para evitar golpear a los vehículos de alrededor), detector de fatiga, aire acondicionado, radio CD/MP3 y casi todo lo importante. Y aunque no hay precios definitivos, las tarifas serán similares a las del modelo actual a igualdad de motor y equipamiento: estará disponible desde unos 16.800 euros la versión básica de acceso a la gama y a partir de unos 18.000 los diésel más asequibles.
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