El Aston Martin DB5 de James Bond para niños cuesta 105.000 euros

En la última entrega de la saga de James Bond, Sin tiempo para morir, reaparece un modelo mítico de la historia del agente secreto, el Aston Martin DB5. Para celebrarlo, The Little Car Company (LCC), especializada en crear réplicas a escala, presenta un modelo de edición limitada del que solo se fabricarán 125 unidades y que cuenta con la mayoría de los accesorios funcionales que se han podido ver en las películas. Cuesta 105.000 euros (90.000 libras).

Como ya ocurrió con el Aston Martin DB5 Goldfinger Continuation, esta réplica es idéntica al modelo original. Sin embargo, por razones de espacio, en este caso es descapotable en vez de cupé.

Lo más destacable es que lleva incorporados muchos de los sistemas que Bond utilizaba en sus películas para dar caza a sus enemigos o huir de ellos. Así, un panel con varios interruptores permite activar un dispensador de humo, cambiar el número de la matrícula (digital, en este caso) o mostrar dos metralletas falsas en el hueco que dejan los faros delanteros al abrirse.

El pequeño Aston Martin DB5 utiliza un pequeño motor eléctrico de 16 kW de potencia (24 CV) y su autonomía es de unos 130 kilómetros por carga. No se ha anunciado su velocidad máxima, que en el Aston Martin DB5 normal que ya formaba parte del catálogo de LCC, con menos potencia, era de 48 km/h. Esta, además, es bastante más barata que la versión de 007: sus precios arrancan en 35.000 libras, que al cambio actual suponen algo menos de 41.000 euros.

La compañía también ha recreado otros vehículos míticos como el Ferrari Testa Rossa J (299 unidades a 93.000 euros cada una) y, hace ya unos años, el Bugatti Baby II (500 unidades a 30.000 euros).