El pequeño urbanita eléctrico de Renault, el Twizy, llega por fin a los concesionarios españoles el 23 de abril y a final de mes se empezarán a entregar las primeras 400 unidades a los clientes que los habían reservado en los últimos meses.
El Twizy se vende en dos versiones según su velocidad máxima: 45 y 80. El Twizy 45 es apto para conducir sin carnet, basta el permiso de ciclomotores, alcanza 45 km/h y se vende desde 4.917 euros en el acabado básico Urban. Además, se ofrece en terminaciones Color por 5.128 y Technic por 5479. El Twizy 80, que exige ya carnet de coche y alcanza 85km/h, sube a 5.409 euros con el acabado Urban, 5.620 con el Color y 5.972 con el Technic. Todos los precios incluyen ya los impuestos y las ayudas del Gobierno, pero hay que sumarles otros 50 euros mensuales de alquiler de las baterías con un tope de 7.500 kilómetros al año. Renault ofrecerá también otras cuotas para los clientes que vayan a superar ese tope anual. Por último, las puertas abatibles que se abren hacia arriba, cuestan 590 euros más
El Twizy es un cuadriciclo biplaza de apenas 2,33 metros de largo, 36 centímetros menos que un Smart Fortwo, que ocupa casi como un escúter y permite alojar a dos adultos en tándem y aparcar de frente contra la acera. Lleva unas baterías de 6,1 kWh que se recargan en solo 3,5 horas en un enchufe normal y ofrece 100 kilómetros de autonomía oficial, que se quedan en unos 70 a 80 en uso real en ciudad y entre 55 y 65 kilómetros cuando se circula en carretera, según las pruebas realizadas por El PAÍS en la presentación del modelo que está teniendo lugar en Ibiza. Estas autonomías suponen un coste de uso de entre 1,5 y 2 euros cada 100 kilómetros, unos 5 o 6 euros menos que los mejores utilitarios turbodiésel.
El Twizy se fabrica en Valladolid en exclusiva para todo el mundo y Renault espera producir unas 20.000 unidades al año, aunque se podría llegar hasta 60.000 con tres turnos de producción si la demanda se dispara.
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