Los coches eléctricos todavía no consiguen sacudirse ciertos prejuicios. Las baterías, su degradación y las dificultades de la carga son algunos de ellos y los que más frenan a los conductores.
Un nuevo estudio pinta, no obstante, un panorama bastante alentador, sobre todo de cada a los coches eléctricos usados. Y es que el mercado de segunda mano es una gran opción para encontrar vehículos electrificados baratos, pero la depreciación de la batería es un gran miedo a superar.
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El estudio ha sido elaborado por Pickles Automotive Solutions y analiza el estado y la capacidad de la batería de 250 coches eléctricos de segunda mano, con kilometrajes de hasta 120.000 kilómetros. Los resultados han sorprendido gratamente a todo el sector.
De media, la capacidad de las baterías de los coches eléctricos usados se mantenía en un 90,1%. Este porcentaje es suficiente para desmontar el mito de la degradación de las pilas y ayuda a superar el miedo a apostar por coches electrificados de segunda mano, sensiblemente más económicos que los nuevos.
Poniendo en foco en los kilometrajes, los resultados del estudio indican que los vehículos que han recorrido entre 40.000 y 80.000 kilómetros mantienen de media el 94,6% de la capacidad original de la batería. Aquellos con menos de 20.000 kilómetros tienen la batería casi intacta, con un 98,2% de la capacidad.
Las marcas con menor degradación de batería
El estudio también analizó la degradación de las baterías de los coches eléctricos usados según la marca. Los coches Hyundai lideran los resultados con un 99,31% de salud de la batería de media, seguidos por BYD con 98,62% y Tesla, con 93,3%.
La verdad es que estas cifras abren un nuevo panorama sobre los coches eléctricos y, sobre todo, la degradación de las baterías. Aquí hay que hablar, también, del coste de sustitución de las pilas, que cada año que pasa disminuye. No obstante, este cambio todavía sigue siendo elevado.
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Eso sí, el estudio desmiente uno de los mitos más difundidos sobre los coches eléctricos: que las baterías de los coches eléctricos se degradan rápidamente y tienen una vida útil corta. Según lo demostrado, las baterías están diseñadas para durar años con una degradación mínima.
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