Polestar se lanzó al mercado como marca de coches exclusivamente eléctrico en 2022. De la mano de Volvo, ya que ambas empresas son propiedad del grupo chino Geely, en su primer año de actividad matricularon en España 180 unidades de su entonces único modelo, el Polestar 2.
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Al siguiente ejercicio, y siempre basando su oferta en la berlina eléctrica exclusivamente, las ventas ascendieron a 600 unidades, que serán en torno a 100 más cuando se cierre este 2024. Su propuesta incluye ya al Polestar 3 y Polestar 4, aunque su incorporación real a la gama se ha producido en el último trimestre del año y el efecto positivo en el volumen se apreciará más adelante.
Polestar se planteó estos primeros años de existencia como de lógico posicionamiento en el mercado. Una marca completamente desconocida y de enfoque prémium precisaba de darse a conocer entre los clientes, tanto particulares como empresariales. El volumen, por tanto, no ha sido ni será su prioridad, aunque sus responsables sí esperan un crecimiento significativo con la incorporación progresiva de nuevos modelos.
Un crecimiento sostenible que también se basaba en un modelo de distribución diferente al habitual. Con unos primeros centros físicos en Madrid, Barcelona y Valencia, estos espacios representaban un escaparate de sus automóviles, lejos del concepto tradicional de concesionario ya que las ventas se cerraban de manera digital, exclusivamente a través de la web de la marca.
Nuevo enfoque comercial
Superada esta primera fase de asentamiento en el mercado, Polestar ha decidido dar un paso más allá ampliando próximamente su presencia en otras ubicaciones como Málaga, Mallorca o Galicia. Además, aunque mantenga su foco en la venta digital, facilitará a los clientes interesados en cualquiera de sus productos la posibilidad de cerrar la operación en estos mismos espacios, facilitando así la configuración de los coches y, por supuesto, su prueba.
Por otro lado, el canal de empresas se mantiene como fundamental para Polestar. El 65% de las ventas de la marca en Europa se realizan a compañías, flotas o profesionales en operaciones de renting. Sus modelos se han afianzado como una excelente alternativa en este entorno, ya que atesoran cualidades muy valoradas en este mercado: calidad, fiabilidad, sostenibilidad y un servicio de postventa avalado por la red de Volvo.
Polestar tiene acuerdos con las principales compañías de renting a nivel internacional, lo que facilita que sus coches eléctricos figuren en el catálogo de todas ellas y puedan entrar así en la oferta que realizan a los clientes. Una política de precios consistente, huyendo de descuentos o promociones agresivas, resulta del mismo modo esencial para que sus modelos ofrezcan las mayores garantías a las empresas con las que operan, con un valor residual solvente.
Además, la presencia de Polestar en flotas de alquiladores o vehículos de transporte con conductor (VTC) propicia que el conocimiento del producto siga avanzando. Los usuarios de estos servicios se acercan a sus coches de forma ocasional pero suficiente para que lleguen a descubrir sus cualidades y analizar si podrían llegar a satisfacer sus necesidades personales.
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Una vida sobre ruedas. De piloto (malo) de motocross a periodista deportivo en Diario AS, incluyendo una década en los grandes premios de MotoGP. Apasionado de los coches y las motos, en más de 30 años ha tenido el privilegio de probar unos cuantos cientos de unos y de otras. Ahora, subdirector en Prisa Motor.