Tesla se queda fuera de las ayudas para coches eléctricos: estos son los motivos

Elon Musk y, por ende, Tesla, están copando los titulares estos días. Las declaraciones de su hija sobre la marca han sido una de las últimas noticias en publicarse, además de los resultados de ventas.

El anuncio de los nuevos aranceles de Trump a los coches importados, que entra en vigor hoy, también ha afectado directamente a Tesla, aunque quizás no de la manera esperada. Y es que, como se podía prever, algunos países han tomado contramedidas.

Rachel Reeves, canciller de Hacienda del Reino Unido, no ha tardado en hacer declaraciones al respecto. Como coches eléctricos, a veces entre los más vendidos en varios países europeos, los compradores de Tesla consiguen ayudas a la adquisición de este tipo de vehículos, un dinero que repercute positivamente en la empresa estadounidense.

Así, Reeves ha anunciado que van a buscar medidas para apoyar mejor a la industria automovilística del Reino Unido. Obviamente, en detrimento de Tesla, que ahora se lleva la mayor parte de las ayudas. Estas declaraciones hacen pensar en una posible salida de los coches de Tesla de la lista de vehículos aptos para recibir las ayudas en uno de los pocos países en los que la marca de Elon Musk sigue triunfando en ventas.

Cabe recordar que esta medida de sacar ciertos coches de las listas de ayuda a la compra de eléctricos ya la puso en marcha Francia, con los fabricantes chinos en el punto de mira.

Canadá contra Tesla

Pero esta decisión no sería la primera. Canadá ha sacado a Tesla fuera de sus paquetes de ayudas a la compra de coches eléctricos. Además de los enfrentamientos velados entre Canadá y Estados Unidos por estos aranceles de Trump a las importaciones, ha habido un ‘malentendido’ en las adjudicaciones de las ayudas.

Como informa The New York Times, cuatro concesionarios de Tesla en Canadá matricularon en un solo fin de semana de enero 8.653 coches, una cantidad con la que optaron a un total de 43 millones de dólares canadienses en ayudas públicas.

Esta maniobra ha puesto en el punto de mira la distribución de Tesla en Canadá, ya que es matemáticamente poco factible que los concesionarios hubieran vendido dos coches por minuto sin haber cerrado ni un solo día de ese fin de semana.