Cómo reclamar los daños sufridos en un accidente

El proceso puede ser sencillo si lo realiza una compañía aseguradora, pero más tedioso si se encarga el propio afectado.

Choque
Completar un parte amistoso tras un accidente es lo más aconsejable para las reclamaciones. | GETTY IMAGES

Al sufrir un accidente de tráfico con lesiones físicas o desperfectos materiales y la implicación de un tercero puede ser necesario realizar una reclamación de daños. El procedimiento consiste en solicitar al responsable una indemnización que permita cubrir el coste de la recuperación de las personas, la reparación de los vehículos o ambos.

Lo más frecuente es que de esta gestión se encargue la compañía aseguradora del damnificado, ya que prácticamente todas incluyen este servicio como básico. El equipo jurídico del seguro llevará a cabo el proceso, siempre que el responsable de los daños se encuentre identificado y localizado.

Si es el afectado quien realiza la reclamación a título personal deberá hacerse cargo de todas las gestiones. Lo primero será interponer la denuncia correspondiente en el juzgado, contratar a un abogado que lleve el proceso y acudir al juicio cuando se celebre, con los gastos consiguientes. Por ello resulta más que aconsejable contratar siempre una póliza de seguro que incluya esta asistencia jurídica.

La aseguradora defenderá la inocencia de su cliente en el siniestro, para lo que precisará de la mayor información posible sobre lo ocurrido, desde el atestado policial si lo hubiera al parte amistoso de accidente, pasando por declaraciones de testigos, imágenes del siniestro, partes médicos en caso de existir…

¿Quién paga los daños en un accidente?

Para resolver el pago de los daños en un accidente de tráfico lo más efectivo es llegar a un acuerdo entre los implicados mediante un parte amistoso. En ese caso, el conductor que se reconoce como culpable asumirá esa responsabilidad y será su compañía aseguradora la que deba hacer frente a los gastos, ya que se encuentras cubiertos por la póliza obligatoria de daños a terceros.

Si no existe ese acuerdo serán las aseguradoras de los vehículos implicados las que depuren responsabilidades. Y en ese caso los usuarios quedan menos protegidos, ya que la decisión de las compañías puede no coincidir plenamente con sus intereses al tratarse de una negociación entre ellas.

El presupuesto de las posibles reparaciones se realizará en base a la valoración del perito de la aseguradora, al igual que con los partes médicos en caso de lesiones físicas o secuelas, según una serie de baremos establecidos legalmente.

¿Cómo denunciar un golpe en el coche?

En caso de sufrir un impacto en el vehículo sin que el contrario se haya identificado, lo inmediato será dar parte a la compañía aseguradora si se tiene contratada una póliza con cobertura de daños propios.

Será útil disponer de imágenes del lugar donde ha ocurrido el siniestro, si es posible testimonios de personas que lo hayan presenciado y toda la información posible para aclarar lo ocurrido ante la compañía que se hará cargo de la reparación.

En el supuesto de no disponer de esta cobertura, el propietario del vehículo deberá asumir los gastos correspondientes. La póliza obligatoria cubre daños a terceros y puede reclamar los propios en caso de intervenir otra persona, pero nunca se hará cargo de ellos si no hay contrario o se dispone de una póliza a todo riesgo.

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