Todo vehículo que circule por las carreteras españolas debe llevar una matrícula que lo identifique de forma única. Aunque esta norma es general, existen situaciones concretas en las que es posible sustituirla por una nueva.
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La Dirección General de Tráfico (DGT) recuerda que la matriculación es un trámite obligatorio para poder circular legalmente con cualquier vehículo a motor, así como con remolques y semirremolques cuya masa máxima autorizada supere los 750 kilogramos. Además, advierte que no está permitido modificar el tamaño de la placa para instalar una más pequeña, salvo que el vehículo haya sido homologado de fábrica en España con ese tipo de matrícula. Si el coche se entrega con placas estándar, estas no pueden ser reemplazadas por otras de menor tamaño.
La matrícula es un identificador único e intransferible, equivalente al DNI del vehículo. A través de ella se puede acceder a toda la información relevante desde el momento en que el coche entra en circulación. Aunque no es una práctica habitual, algunos conductores optan por rematricular su coche, algo que solo está permitido por la DGT en casos específicos y debidamente justificados.
¿Cuándo se permite rematricular?
Para poder adquirir una matrícula de nuevo formato —también conocida como rematriculación— la DGT únicamente contempla dos opciones:
- Cuando el vehículo dispone de una matrícula antigua, con fecha anterior al año 2000. Aquellas que comenzaban con la letra o letras de la provincia, seguidas de cuatro números y finalizaban con una o dos letras, y el propietario quiere obtener una matrícula de formato actual.
- Cuando las siglas de la provincia no corresponden al lugar donde se está empadronado. De este modo, si se ha adquirido un vehículo con matrícula antigua y no coincide con la provincia de residencia, es posible obtener una matrícula con la nueva configuración.
Cómo rematricular un vehículo
Antes de realizar la solicitud, se debe de acudir a una estación de ITV (con cita previa) para reclamar la expedición de una nueva tarjeta de inspección técnica. Para ello hay que acudir con el permiso de circulación y proporcionar la ficha técnica anterior del vehículo.
La estación de ITV cursará una nueva tarjeta de inspección técnica. A partir de ese momento, ya puede comenzar el proceso de rematriculación del vehículo.
¿Dónde realizar los trámites?
Para proceder a la rematriculación de un vehículo, es posible hacerlo de manera presencial, entregando toda la documentación en cualquier jefatura u oficina de Tráfico. Para ello se debe solicitar cita previa por internet o llamando al 060.
También se puede ejecutar el trámite online, a través del registro electrónico. Para ello es necesario disponer de DNI electrónico, certificado electrónico en vigor o las credenciales de cl@ve para acceder al registro.
¿Qué se necesita?
Para llevar a cabo la petición de rematriculación, se deben seguir estos cuatro pasos:
- Descargar la solicitud y rellenarla: en este enlace se puede descargar y en caso de oponerse expresamente a la verificación telemática del empadronamiento en la solicitud, deberá aportar un justificante de cambio de domicilio, DNI, certificado de empadronamiento, tarjeta censal, o cualquier documento acreditativo. En el mismo impreso de solicitud, puede autorizar a consultar la residencia en el padrón, en cuyo caso no tendrá que aportar la documentación del nuevo domicilio.
- Justificante: para demostrar que se ha realizado el pago de la tasa correspondiente de rematriculación o resguardo de la misma.
- Tarjetas de la ITV: tanto la antigua como la nueva.
- Permiso de circulación del vehículo: en el caso de efectuar el trámite a través de internet, el permiso de circulación original se solicitará cuando se persone en la jefatura u oficina de Tráfico al finalizar el trámite.
¿Cuánto cuesta rematricular un vehículo?
La rematriculación, además del papeleo y las solicitudes que se deben rellanar, también tiene un coste económico. Dependiendo del tipo de vehículo, queda así:
- Ciclomotores: 27,85 euros
- Resto de vehículos: 99,77 euros
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Entusiasta del motor en toda su magnitud, preferiblemente los V12. Le dijeron que cuatro ruedas eran mejor que dos, por eso se compró otra moto. Claro que también le apasiona cuando van las cuatro juntas. Ha trabajado como creativo publicitario para muchas marcas de coches y motos e hizo la mili en esto de juntar letras en la editorial Luike.