Nadie se atrevería a discutir hoy la efectividad de los airbags en los automóviles. También es un dispositivo de seguridad muy generalizado en el motociclismo de competición por sus indiscutibles cualidades de protección. Ahora Dainese va un paso más con un sistema que aporta mejoras significativas respecto a los precedentes.
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Para ello ha desarrollado la tercera generación de la gama D-Air, un avanzado airbag para moto que supera de forma clara en ergonomía y eficacia a los anteriores. Dos son las piezas claves del sistema patentado por la marca italiana y que lo diferencian de otros similares: la propia bolsa de aire y la centralita electrónica que se encarga de la gestión de su accionamiento en caso de necesidad.
Fruto de la investigación en este campo desde hace dos décadas, la bolsa cuenta con una tecnología de microfilamentos interiores que impide su deformación y propicia un inflado controlado de la misma, con una presión y reparto homogéneos. Dainese ha realizado más de 2.000 ensayos de activaciones para conocer el comportamiento del aire y su efecto en la bolsa, persiguiendo que se cubran exclusivamente las zonas del cuerpo donde la protección es necesaria.
Los filamentos en el interior de la bolsa marcan la diferencia.
El sistema es ahora un 37% más ligero que el anterior y se ha integrado de una forma mucho más natural y cómoda en las prendas, siendo totalmente imperceptible y proporcionando un nivel de comodidad similar al de cualquier otra chaqueta de motorista convencional.
El otro componente esencial de lo la gama D-air es la unidad de control electrónico, el cerebro del dispositivo que permite un funcionamiento fiable y efectivo en cualquier circunstancia. La centralita recoge y analiza datos de los sensores un millar de veces por segundo, gracias a un algoritmo desarrollado y utilizado por los pilotos de la marca en el Mundial de MotoGP.
Tres giroscopios, otros tantos acelerómetros y un GPS envían su información a esa unidad de central de control, que es capaz de detectar situaciones de riesgo y decidir si es necesario activar el inflado de la bolsa de aire para proteger al piloto. De esto modo, el airbag no necesita tener ningún tipo de conexión física (mediante un cable) con la moto, por lo que la independencia y movilidad del motorista es total, tan sólo es necesario conectar el dispositivo para que comience a funcionar.
El airbag pasa desapercibido en monos y chaquetas de cuero.
Lo compacto y ligero del sistema facilita su incorporación a la mayoría de prendas de la gama Dainese, desde un mono completo de piel para circuito o conducción deportiva a chaquetas para uso urbano, pasando por las específicas para mujeres, otra importante novedad de la nueva gama D-air. De esto modo, la oferta de versiones cubre la mayoría de las necesidades con once productos diferentes.
Eso sí, el precio continúa siendo uno de los principales escollos para el acceso generalizado a este sistema de seguridad pasiva. El abanico de la tarifa de los airbags de Dainese, cuando se inicie su comercialización en febrero del próximo año, se mueve entre los 1.179 euros de las chaquetas de cuero a los 3.999 euros del mono completo de competición.
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