El superdeportivo de los siete millones de euros: solo hay cinco en el mundo

El Pagani Huayra es uno de los superdeportivos más exclusivos del mercado, pero siempre se puede ir un paso más allá. Dos clientes de la marca pidieron a la firma, hace ya dos años, una versión long tail’ (de cola extendida) del modelo, y el resultado está aquí: el Pagani Huayra Codalunga.

Aunque inicialmente solo fueran un par quienes realizaran la petición, Pagani finalmente ha abierto la producción a cinco ejemplares, cada uno de ellos con un precio de siete millones de euros. Como suele ocurrir en la mayoría de estos casos, antes de empezar a producirse ya estaban todos vendidos.

Su principal rango distintivo es la zaga alargada en 360 milímetros, lo que ayuda a conseguir un conjunto incluso más esbelto de lo habitual. Mantiene la salida de escape cuádruple en posición central elevada y los faros formados por tres grupos ópticos, aunque estos ahora están ordenados en línea.

Puertas de alas de gaviota

La compañía ha aprovechado para introducir ligeros retoques estéticos en zonas como el paragolpes delantero o el faldón lateral, mientras que otros elementos, como las puertas de alas de gaviota, se conservan intactos.

Además, destaca su eficiencia aerodinámica, que mejora gracias a su nueva silueta, pero también por la presencia de elementos de aerodinámica activa como cuatro flaps móviles.

Lo mismo ocurre con el interior, tan recargado como es habitual en el Huayra. Tras el volante se encuentran tres relojes analógicos y una pequeña pantalla, y en todo el salpicadero se combinan la tapicería de cuero con superficies metalizadas y de fibra de carbono. Por último, no falta la iluminación LED en los tiradores de las puertas, así como el nombre de la versión en varios lugares del habitáculo.

Un motor de 851 CV

Por lo que respecta a la mecánica, Pagani ha utilizado el mismo bloque V12 que desarrolla 851 CV de potencia y 1.100 Nm de par máximo. La única modificación es un nuevo sistema de escape de titanio más largo, que suma 4,4 kilos de peso y hace que el conjunto alcance los 1.280 kilos.

“Hicimos el Huayra Codalunga más largo y suave, como si hubiera sido acariciado y moldeado por el viento, para diseñar líneas que fueran aún más elegantes que las del cupé. Nos inspiramos en los long tail de la década de 1960 que corrieron en Le Mans, que tenían líneas muy limpias”, indica Pagani en un comunicado.