Los tubos de vacío son una tecnología ya veterana en el mundo de las energías limpias. Se trata de un sistema relativamente sencillo, compuesto por unos tubos concéntricos que disponen entre ellos de una cámara de vacío (sin aire en su interior) y por donde circula el líquido que se quiere calentar, por ejemplo agua o aceite.
Expuestos al sol, y sin el efecto disipador de la atmósfera, el calor en su interior se intensifica de tal manera que el líquido alcanza de forma rápida temperaturas elevadas.
Esta forma de aprovechar el calor solar es de las más eficaces que existen y se viene utilizando, por ejemplo, para calentar agua en los hogares o para accionar grandes turbinas en las plantas solares generadoras de energía.
Naked Energy es una empresa estadounidense, financiada por la casa matriz ELM Companies, especializada en energías sostenibles, que ha aplicado un sistema de tubos de vacío que innova al incluir en su interior unas células fotovoltaicas.
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Más eficientes que los paneles solares
El invento supone una alternativa a las habituales placas solares que solo sirven para generar electricidad. Al captar la luz solar, interacciona con los materiales semiconductores que contienen sus celdas y la transforman en energía.
El nuevo sistema se llama Virtu y, según los responsables de la compañía, a la hora de producir energía es de tres a cuatro veces más eficiente que los paneles solares tradicionales.
Virtu estará próximamente disponible en el mercado estadounidense y, una vez instalado en el tejado de la vivienda, servirá tanto para suministrarle electricidad como calor para el baño o la calefacción.
Las ventajas como generador del tubo de calor no son pocas y sus impulsores las detallan. En primer lugar, minimizan las pérdidas térmicas en la atmósfera potenciando su eficiencia, sobre todo en los climas más fríos.
La tecnología solar con mayor densidad energética
Pero también destacan porque, gracias a la inclinación orientable de sus células fotovoltaicas, pueden captar el máximo de energía solar en cualquier lugar donde estén ubicados, ya sean tejados inclinados u horizontales o dispuestos en las fachadas del edificio.
Además, al servir para dos fines distintos (generar calor y electricidad) ahorran mucho espacio al no tener que duplicar la instalación.
Calificada por sus creadores como la “tecnología solar de mayor densidad energética del mundo”, Virtu es una instalación totalmente modular, por lo que ofrece un bajo coste de instalación.
Muy planos, los módulos no ofrecen apenas resistencia al viento y, según la empresa, son especialmente adecuados para edificios que requieran una gran demanda de energía, como bloques de viviendas, fábricas y hoteles.
Próxima comercialización en EE UU
Los tubos de vacío Virtu pueden ser de dos tipos. El VirtuHOT es el convencional, de funcionamiento solo térmico y que sirve para calentar el agua corriente del edificio (hasta 90º).
Pero el VirtuPVT es híbrido y combina la tecnología solar fotovoltaica con la térmica para generar a la vez calor y electricidad destinada al uso doméstico o también para recargar las baterías de los vehículos eléctricos.
Los tubos de vacío de Virtu van a ser fabricados en una nueva planta que ahora se construye en el Estado de Texas y en breve estarán disponibles en el mercado norteamericano.
Más eficientes que los paneles solares, suelen resultar también más caros y habrá que esperar a ver si su comercialización a gran escala les hará también competitivos en el mercado de las energías renovables.
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Cuatro décadas informando sobre el mundo del motor y probando coches de todas las categorías. Después de trabajar en diversos medios especializados (Velocidad, Auto1, Solo Auto, Motor 16, Car and Driver, EcoMotor...), ahora en Prisa Media para seguir cubriendo la actualidad en plena revolución tecnológica del automóvil.